:format(jpeg)/www.elespectador.com/resizer/F5ddiSRUEIajsq2kvUxbdOCBrFI=/arc-anglerfish-arc2-prod-elespectador/public/WQQENVQQNVGOPKIW3TCOFBK3EA.jpg)
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció este lunes que aumentará el límite de refugiados admitidos a 62.500 en este año fiscal (que termina en septiembre). La decisión se dio después de recibir críticas por mantener el mínimo de 15.000 personas admitidas, una cifra marcada por el gobierno de Donald Trump. “Esto borra una cifra históricamente baja establecida por el anterior gobierno de 15.000, que no refleja los valores de Estados Unidos como nación que acoge y apoya a los refugiados”, indicó la Casa Blanca en un comunicado.
Le puede interesar: Confusión en la Casa Blanca: a Biden se le está saliendo la crisis migratoria de las manos
A finales de octubre del año pasado Trump fijó en 15.000 la cuota de refugiados para el año fiscal 2021, entre el 1 de octubre de 2020 y el 30 de septiembre de 2021, la más baja desde que entró en vigor en 1980 la ley que regula este amparo. El exmandatario republicano llegó a referirse a los refugiados como una carga y una amenaza para la seguridad del país.
Hace poco más de dos semanas Biden anunció que no iba a aumentar el número de refugiafos admitidos en este año fiscal, lo que generó una ola de críticas por parte de los demócratas. “Simplemente no hay excusas para la vergonzosa decisión de hoy”, tuiteó la representante Ilhan Omar el 16 de abril, quien vale destacar fue refugiada en un campamento en Kenia luego de huir de la guerra civil en Somalia.
Algo similar comentó en ese entonces Krisj O’Mara Vgnarajah, presidente y director del Servicio Luterano de Inmigración y Refugiados a The Washington Post: “Es profundamente decepcionante que la administración haya elegido dejar en ese lugar el vergonzoso récord mínimo de su predecesor”.
Le puede interesar: Joe Biden anunció que EE. UU. recibirá 125.000 refugiados por año
Con todo y el cambio de decisión, el mismo mandatario aseguró que no solo basta con aumentar la cifra de admitidos. “La triste verdad es que no lograremos 62.500 admisiones este año”, dijo Biden según CNN. “Estamos trabajando rápidamente para reparar el daño de los últimos cuatro años. Tomará algún tiempo, pero ese trabajo ya está en marcha”, agregó el mandatario.
En febrero de este año, y de acuerdo con una promesa de campaña, Biden estableció la cuota anual de refugiados que pueden ser admitidos bajo el programa de reasentamiento en 125.000 personas. Esto en un periodo de 12 meses que comienza el 1 de octubre. Sin embargo, este lunes el mandatario dijo que será una meta difícil de alcanzar.
Le puede interesar: Confusión en la Casa Blanca: a Biden se le está saliendo la crisis migratoria de las manos
“Puede que no lo logremos el primer año. Pero vamos a utilizar todas las herramientas disponibles para ayudar a estos refugiados que han sido examinados por completo y que huyen de las horribles condiciones en sus países de origen”, aseveró.
La crisis migratoria
Biden prometió un enfoque más humano hacia los inmigrantes indocumentados tras la postura dura de Trump, enfocada principalmente en las barreras físicas. Pero el nuevo gobierno no estaba bien preparado para la oleada de migrantes, especialmente centroamericanos, hacia la frontera sur. Las instalaciones de acogida sobrecargadas con niños sin acompañantes dieron pie a los críticos republicanos al tiempo que causó molestia entre los seguidores de Biden.
En los primeros días de marzo, varios reportes sugerían que los refugios para menores de edad que cruzan la frontera estaban recibiendo un promedio de 321 niños por día, frente a los 47 de la primera semana de enero. La rápida afluencia de niños llevó a que el presidente Biden pidiera 20.000 nuevas camas para albergarlos. También pidió aumentar la capacidad en los refugios que el Departamento de Salud y Servicios Humanos había limitado a la mitad con la intención de reducir el riesgo de brotes de COVID-19.
Con información de Afp*