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Un operativo de las autoridades mexicanas concluyó en la captura de Ovidio Guzmán, uno de los herederos del tráfico de estupefacientes del hoy extraditado Chapo Guzmán. En el momento de su captura, alias el Ratón tenía un largo expediente criminal en México y Estados Unidos, específicamente por el tráfico de drogas hacia territorio norteamericano.
A sus 32 años, Ovidio Guzmán es uno de los cuatro hijos de Joaquín Guzmán que heredó el negocio de transportar drogas desde México hacia otros países. Desde la captura de su padre, en 2016, el Ratón, dicen las autoridades, se encargó del transporte de metanfetaminas, mientras que sus otros hermanos se dedicaban al tráfico de otras sustancias como marihuana y cocaína.
Los otros descendientes de los negocios del Chapo son Joaquín, Iván Archivaldo y Jesús Alfredo. Cabe recordar que otro de los hijos que lideraba los negocios del cartel era Édgar Guzmán. El entonces considerado primogénito del Chapo fue abaleado en 2008 en un centro comercial de México. Los reportes de ese momento hablan que Edgar Guzmán recibió 500 disparos por parte de un grupo de pistoleros.
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Estos no son los únicos hijos del “zar de la cocaína” Guzmán. En 1997, Joaquín Guzmán se casó con Alejandrina Salazar. De ese matrimonio nacieron Jesús Alfredo, Iván Archivaldo, Alejandrina y César.
Más adelante, el Chapo se casó con Griselda López. Con esta mujer tuvo un linaje conformado por Joaquín, Edgar (ya muerto), Griselda y Ovidio, hoy capturado. Finalmente, la tercera y actual esposa de Guzmán es Emma Coronel, hoy sentenciada a 36 meses de prisión y cumple su pena en un calabozo de Estados Unidos. Con Coronel, Guzmán tuvo dos gemelas.
De pelo medio ondulado, barba rala y cara delgada, Ovidio Guzmán habría estado manejando el negocio de las drogas desde 2008. Así lo informó el Departamento de Estado de EE. UU., entidad encargada de hacer seguimiento a los diferentes emporios de drogas en Centroamérica y Suramérica. Al menos hasta 2018, esas han sido las principales actividades de Guzmán, aseguró la entidad estadounidense.
Apodado como el Ratón por su forma escurridiza de ocultarse de la justicia, el hijo del Chapo ha sido, probablemente, uno de los responsables de que la banda criminal de Sinaloa sea “la organización transnacional de tráfico de narcóticos más fuerte de Occidente”, como la cataloga el medio de comunicación mexicano Plan V.
Esto se debe, explica la periodista Anabel Hernández, a que la organización conglomera “no solo su blindaje operativo, armado y económico, sino su capacidad de volver el narcotráfico un negocio exitoso”, como aseguró en sus libros que versan sobre el tráfico de drogas de México.
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A hoy, Ovidio Guzmán era considerado como el líder de Los Menores, una facción organizada del cartel de Sinaloa. La Administración de Control de Drogas también lo clasifica como miembro de otra banda bautizada como Los Chapitos, conformada por él y sus demás hermanos. De acuerdo con el portal Insight Crime, el cartel de Sinaloa opera en 17 de los 32 estados de México.
Las autoridades estadounidenses han concluido que Ovidio Guzmán sería el cerebro detrás de “laboratorios que producen mensualmente entre 1.360 y 2.220 kilogramos de metanfetaminas”, según contó AFP. La recompensa, hasta hoy, por información relacionada a la captura de el Ratón era de US$ 5 millones.
Hoja de vida criminal
El recorrido en el narcotráfico de Ovidio Guzmán es un fenómeno de larga data. En febrero de 2019, fue acusado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos por conspirar para importar drogas a ese país.
Sin embargo, el Ratón también tiene cuentas pendientes con la rama judicial en México. Todos estos cargos en el país presidido por Andrés López Obrador tienen relación al tráfico de drogas, actividades delincuenciales organizadas y asociación ilícita en varios de los estados mexicanos.
Con su captura este jueves, Guzmán probablemente sea requerido en Estados Unidos para que enfrente los cargos que se le imputan. De acuerdo con los expedientes de la DEA, el Ratón es responsable de introducir fentanilo en las calles de Norteamérica; una sustancia más dañina y peligrosa que la cocaína.
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De acuerdo con el diario mexicano La Razón, “Estados Unidos está dispuesto a pagar hasta US$ 95 millones” por uno de sus “objetivos prioritarios”.
“Otra información señala que Ovidio ha ordenado el asesinato de informantes, un narcotraficante y un cantante famoso que se rehusó a cantar en su boda”, añade la reseña del Departamento de Estado.
Guzmán se dio a conocer en todo México el 17 de octubre de 2019, cuando las autoridades mexicanas lo detuvieron para liberarlo posteriormente por orden del presidente Andrés Manuel López Obrador, en medio de una asonada criminal conocida como el Culiacanazo.
El mandatario mexicano defendió esa decisión, duramente criticada, con el argumento de que se evitó un baño de sangre, cuando contingentes militares quedaron prácticamente cercados por sicarios dotados de armas largas.
La canción de el Ratón Guzmán
Otro de los motivos por los que Ovidio Guzmán es conocido como Ratón es una canción popular que la banda Código FN compuso y le dedicó. La letra se centra sobre el perfil de un heredero.
De acuerdo con la AFP, la canción está compuesta por versos en primera persona y se hace mención de un “jefe con mucho cerebro”, de “sangre caliente y de acción”. También se refiere al gusto del “heredero” por los autos de lujo.
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