"Vamos a revisar la agenda, todo lo que haya sobre el despacho, tomaremos algunas decisiones con el señor presidente (Ricardo Martinelli) y con el equipo de la Cancillería", dijo Álvarez de Soto a periodistas antes de su participación con el mandatario panameño en una reunión con el cuerpo diplomático acreditado en el país.
Álvarez de Soto indicó que todos los temas que hayan quedado pendientes en agenda serán tratados con "prudencia y sentido común", reiterando que en todo seguirá las instrucciones de Martinelli.
Núñez Fábrega le deja en agenda varios asuntos importantes, entre ellos, la demanda presentada por Panamá a Ecuador para que le devuelvan el barco "Doria" de bandera panameña que fue detenido con cocaína el 13 de octubre pasado, a 126 millas náuticas de las costas ecuatorianas.
El excanciller denunció en su momento que Ecuador condiciona la repatriación del "Doria", su tripulación y carga a una revisión del asilo humanitario que Panamá le dio en octubre al político y exparlamentario opositor ecuatoriano Galo Lara, condenado en su país a diez años de cárcel por su vinculación con un triple asesinato.
Núñez Fábrega, que debía emprender una gira por varios países asiáticos este mes, rechazó revisar el asilo y Ecuador ha negado condicionar la devolución del barco.
El nuevo canciller afirmó que su prioridad será la de promover la imagen del país "neutral" y "amigo de todos los países y naciones. Ese tiene que seguir siendo el norte de la política exterior".
Abogado y economista, Álvarez de Soto desempeñó el cargo de vicecanciller, al que renunció para dedicarse a asuntos personales y de negocios el 26 de febrero de 2013, el mismo día que Núñez Fábrega fue designado para reemplazar al entonces titular Rómulo Roux.
El viernes pasado, la Presidencia panameña informó que Martinelli aceptó la renuncia de Núñez Fábrega, que dimitió para atender compromisos privados y familiares, y le ofreció el cargo a Álvarez de Soto.
Sin embargo, Martinelli se desmarcó de esta versión oficial y dijo a periodistas, tras reunirse con el cuerpo diplomático, que Núñez Fábrega, de 72 años, tenía "problemas de edad" y "no podía viajar".
"El señor (ex) canciller estaba muy viejo ya, no podía hacer los viajes que estaban programados ya de aquí hasta el 30 de junio, y esto ya estaba cronometrado, planeado ya hace mucho tiempo", aseguró Martinelli