Rusia cortó el suministro de gas a Países Bajos, pero la UE no sancionará por ahí

Los Países Bajos se suman al grupo de países a los cuales Rusia les ha cerrado los grifos de su gas. El Kremlin ya había tomado la decisión de detener el suministro a Bulgaria, Polonia y Finlandia, después de que se negaran a pagar en rublos rusos la importación del recurso.

Foto: EFE - MAXIM SHIPENKOV

Rusia cortó el suministro de gas al comerciante holandés GasTerra, coincidiendo con la decisión de la Unión Europea de imponer un embargo parcial sobre el petróleo ruso, en el marco de los más de tres meses de la guerra en Ucrania. Ahora bien, la compañía aseguró que había encontrado contratos en otros lugares para el suministro de los 2.000 millones de metros cúbicos de gas que esperaba recibir de Gazprom, la empresa de energía rusa, hasta octubre.

Con esta decisión, los Países Bajos se suman al grupo de países a los cuales Rusia les ha cerrado los grifos de su gas. El Kremlin ya había tomado la decisión de detener el suministro a Bulgaria, Polonia y Finlandia, después de que se negaran a pagar en rublos rusos la importación del recurso. Además, a partir del 1 de junio, Rusia le cortará el flujo de gas a Dinamarca.

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La Unión Europea no sancionará el gas, por ahora

Los líderes europeos dijeron que era poco probable que el gas ruso fuera parte de la próxima ronda de sanciones contra Rusia, horas después de acordar un embargo parcial al petróleo. Después de casi un mes de disputas, la Unión Europea prohibió el 90 % de las importaciones de petróleo ruso para fin de año, con una exención para Hungría, Eslovaquia y la República Checa. Estos países de Europa central, sin acceso al mar, que dependen en gran medida del petróleo ruso, pueden seguir siendo abastecidos a través del oleoducto Druzhba, de la era soviética, durante un período indeterminado.

La primera ministra estonia, al igual que sus homólogos de los países bálticos y Polonia, quiere que la Unión Europea elimine gradualmente el gas ruso. Pero Kallas dijo que era “realista” y que no esperaba ver el gas en el próximo conjunto de sanciones. “El gas es, por supuesto, mucho más difícil de lo que ya era el petróleo”, dijo a los periodistas en el segundo día de una cumbre del bloque de países. “Todas las próximas sanciones serán más difíciles, porque hasta ahora solo han perjudicado a los rusos, pero ahora también están teniendo efectos en los europeos. Por eso, políticamente, es mucho más difícil decidir”, agregó.

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