Publicidad

Bolivia, dos caras de unas elecciones atípicas

Aunque son seis candidatos los que se disputan la presidencia del país, Luis Arce, del Movimiento Al Socialismo (el de Evo Morales), y el expresidente Carlos Mesa, de Comunidad Ciudadana, son los favoritos. Anticipan una segunda vuelta.

16 de octubre de 2020 - 02:00 a. m.
Sacerdotes aimaras realizan un rito a la Madre Tierra junto a cientos de seguidores del candidato Luis Arce, del Movimiento Al Socialismo (MAS). / EFE
Sacerdotes aimaras realizan un rito a la Madre Tierra junto a cientos de seguidores del candidato Luis Arce, del Movimiento Al Socialismo (MAS). / EFE
Foto: EFE - Martin Alipaz

Tras el terremoto político que se desató en Bolivia luego de la salida de Evo Morales del poder el 10 de noviembre del año pasado, por unas cuestionadas elecciones, el país volverá a las urnas el próximo domingo 18 de octubre. ¿Quién tomará las riendas del país? Estos son los dos candidatos con más opciones para asumir la Presidencia, hoy en manos de Jeanine Áñez. Expertos dicen que habría una segunda vuelta en noviembre.

Luis Arce

Todo parecería indicar que Luis Arce podría llegar a la Presidencia de una Bolivia convulsionada por la crisis económica más profunda en casi 40 años: el país espera una contracción del PIB de 6,2 % en 2020, la peor caída desde la década de 1980. Un escenario al que habría que sumarles el aumento del déficit fiscal, la pérdida constante de reservas internacionales y el creciente endeudamiento. Una crisis derivada no solo de la pandemia -que en Bolivia ya deja cerca de 140 mil contagiados-, sino de un país envuelto en un desequilibrio político y social.

Panorama que podría no ser el mejor a la hora de elegir a un mandatario. Sin embargo, esta crisis es precisamente lo que podría catapultar a Arce -el delfín de Evo Morales- al Palacio Presidencial de Bolivia. Antes de su candidatura era conocido como el “milagro económico” en el país, pues fue ministro de Economía de Morales, quien dice, desde su exilio en Argentina, que Arce es “garantía de la estabilidad, crecimiento económico y redistribución de riqueza”.

Arce, de 57 años, es contador y economista. Fue ministro de Hacienda en 2006 y ministro de Economía y Finanzas Públicas en el primer gobierno en 2009. Trabajó en el Banco Central de Bolivia por 18 años y dictó clases en la Universidad Mayor de San Andrés, en La Paz. Habla fluido inglés y portugués. El básquetbol es su deporte favorito.

La influencia del socialismo en la vida de Arce llegó a tal punto, que su hijo mayor se llama Rafael Ernesto, en homenaje al Che Guevara; el segundo de sus hijos se llama Luis Marcelo, por el líder del Partido Socialista 1 (PS-1) en Bolivia.

“En mi época juvenil siempre sentí la necesidad de una imagen o persona a quién admirar (...) Las ideas de Marcelo Quiroga Santa Cruz me obligaron a leer bastante y junto a la literatura socialista que me daba mi tío. De pronto, a mis 14 años, ya era un militante socialista. Pero entre mis arraigos de la izquierda latinoamericana por supuesto aparecen el Che Guevara y Fidel Castro. En Chile tenemos a Salvador Allende y Víctor Jara, tantos revolucionarios”, contó Arce al diario chileno La Tercera.

Carlos Mesa

La oposición de Bolivia luchó durante 15 años para tratar de arrebatarle el poder a Evo Morales, el líder indígena que gobernó desde 2006 hasta 2019. No lo lograron, entre otras cosas, porque nunca hubo un candidato único; esta vez tampoco lo tienen, aunque Carlos Mesa tiene opciones: aparece segundo en las encuestas.

Entre 2001 y 2005, Bolivia tuvo cinco presidentes, Carlos Mesa fue uno de ellos. Llegó al poder siendo vicepresidente, luego de que el entonces mandatario, Gonzalo Sánchez de Lozada, escapara del país en medio de semanas de protestas y una masacre que dejó más de 70 muertos.

Gobernó hasta 2005 bajo la amenaza permanente de las protestas sociales organizadas por Evo Morales, con quien se midió en las urnas justamente en octubre de 2019. Perdió esas elecciones señaladas de fraudulentas que desencadenaron la convulsión que sacó a Morales del poder.

Mesa, de 67 años, es periodista, historiador y literato. En la década de 1990 creó un canal de televisión y gana notoriedad gracias a premios periodísticos en el país y fuera de él. En su breve mandato no logró apoyos significativos en el Congreso y organizó un referendo para definir las políticas nacionales sobre hidrocarburos, pero nada calmó la convulsión social. Renunció en 2005, acosado por la crisis económica, política y social.

Sus críticos le recuerdan justamente esa salida abrupta del poder y lo señalan como incapaz de gobernar ante la convulsión social. Mesa responde que, si gana, no renunciará.

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar