
Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Un terremoto potente que sacudió la costa norte de Japón el lunes llevó al gobierno a emitir un aviso inusual de que había aumentado la posibilidad de que se produjera un terremoto mucho mayor y más destructivo la próxima semana.
Aunque los científicos no pueden predecir cuándo se producirá un sismo, ni si ocurrirá, la probabilidad de que se produzca un llamado megaterremoto durante la próxima siguiente aumentó al 1 por ciento. Puede parecer poco, pero representa un aumento significativo respecto a las probabilidades habituales.
El gobierno utiliza este término para referirse a cualquier sismo de intensidad superior a 8 en la escala de Richter. Para poner esa cifra en perspectiva, un terremoto de dicha potencia es unas 32 veces más fuerte que uno de 7 grados.
Por eso las autoridades se toman muy en serio incluso una probabilidad del 1 por ciento.
Esto es lo que significa el aviso:
El aviso indica un aumento de la probabilidad de un terremoto mayor
Los científicos revisan los datos históricos cada vez que se produce un terremoto superior a 7 grados. Eso es lo que ocurrió el lunes, cuando un terremoto de magnitud 7,6 sacudió la zona cercana a la prefectura de Aomori, en el norte de Japón.
El gobierno emitió el aviso porque existe una posibilidad “más probable de lo normal” de que la próxima semana se registre un terremoto de magnitud 8, dijo Fumiaki Tomita, profesor del Instituto Internacional de Investigación de Ciencias de los Desastres de la Universidad de Tohoku.
La probabilidad de que esto ocurra en los próximos siete días es ahora de 1 entre 100, según los datos históricos de terremotos en el mundo, según la agencia meteorológica. La agencia emitió su primer aviso de megaterremoto en 2024, la cual expiró siete días después sin que se hubiera producido un sismo más potente.
El gobierno señala una serie de terremotos ocurridos en marzo de 2011 y otros datos históricos, como prueba de que los terremotos potentes pueden sucederse unos a otros. El 11 de marzo de ese año, un terremoto de magnitud 9,1 devastó la costa noreste del país, y desencadenó un tsunami que derivó en la muerte de más de 19.000 personas. Dos días antes, un sismo menos potente había sacudido la región.
Aunque el 1 por ciento es bajo, es aproximadamente 10 veces superior a la probabilidad habitual de que se produzca un terremoto de magnitud 8 en la región, dijo Takuya Nishimura, profesor del Instituto de Investigación para la Prevención de Desastres de la Universidad de Kioto. El aviso abarca una zona desde el norte de Japón hasta cerca de Tokio.
El aviso no restringe las actividades cotidianas ni exige la evacuación de la población, pero insta a la gente a estar preparada.
El terremoto del lunes hizo que se tambalearan edificios y puentes y más de 30 personas resultaron heridas, según los medios de comunicación locales. No se informó de muertes ni de daños importantes.
La geología de Japón hace que los grandes terremotos sean inevitables
La ubicación de Japón a lo largo del “Cinturón de Fuego” del Pacífico, una cadena de fallas sismológicamente activas que rodean el océano Pacífico, lo convierte en uno de los países más propensos a los terremotos del mundo. La nación experimenta unos 1500 terremotos al año, o hasta tres al día, según la Universidad de Tokio.
Japón tiene un largo historial de megaterremotos devastadores, como el de marzo de 2011, que fue el más fuerte de la historia del país. En 2003, un terremoto de magnitud 8 golpeó a unos 80 kilómetros de la costa sureste de Hokkaido, la isla principal más al sur de Japón, y dejó sin electricidad a decenas de miles de personas.
“El temor a los grandes terremotos en Japón es una realidad”, dijo Meghan S. Miller, profesora de la Escuela de Investigación de Ciencias de la Tierra de la Universidad Nacional de Australia.
El sistema de aviso de megaterremotos se introdujo en 2022, según los expertos y los medios de comunicación locales.
Japón es líder mundial en avisos de terremotos
Aunque los científicos no pueden predecir con exactitud el momento, el lugar y la magnitud de un terremoto, Japón cuenta con uno de los sistemas de alerta temprana más avanzados del mundo, dijo Miller.
El gobierno opera cientos de sismómetros en tierra y agua. Cuando se produce un terremoto, los instrumentos detectan su onda primaria en cuestión de segundos, lo que permite a las autoridades emitir alertas con rapidez.
Si los instrumentos registran sacudidas de una intensidad sísmica de 3 o superior en la escala japonesa de 10 niveles, la agencia meteorológica emite un reporte de Información sobre la Intensidad Sísmica en 90 segundos.
Otros países con sistemas avanzados de preparación ante terremotos son Chile, que revisó sus normas de construcción tras el terremoto de magnitud 7,8 que sacudió Valparaíso en 1985, y México, que ha reforzado de manera reiterada sus normas en las últimas décadas y ahora se considera uno de los países más avanzados del mundo. En Japón, los códigos de construcción se hicieron más estrictos en 1981 y en 2000 para aumentar la seguridad y la responsabilidad de los constructores.
👀🌎📄 ¿Ya se enteró de las últimas noticias en el mundo? Invitamos a verlas en El Espectador.
🌏📰🗽 El Espectador, comprometido con ofrecer la mejor experiencia a sus lectores, ha forjado una alianza estratégica con The New York Times con el 30 % de descuento.
Este plan ofrece una experiencia informativa completa, combinando el mejor periodismo colombiano con la cobertura internacional de The New York Times. No pierda la oportunidad de acceder a todos estos beneficios y más. ¡Suscríbase aquí al plan superprémium de El Espectador hoy y viva el periodismo desde una perspectiva global!
📧 📬 🌍 Si le interesa recibir un resumen semanal de las noticias y análisis de la sección Internacional de El Espectador, puede ingresar a nuestro portafolio de newsletters, buscar “No es el fin del mundo” e inscribirse a nuestro boletín. Si desea contactar al equipo, puede hacerlo escribiendo a mmedina@elespectador.com o a cgomez@elespectador.com