“Con 9,4 millones de personas que necesitan alimentos, nuestra operación en Etiopía supera ahora a la de Sudán”, donde se consideraba que tenía lugar la peor crisis alimentaria, dijo la portavoz del Programa Mundial del Alimentos (PMA), Emilia Casella.
Para asistir a ese número de personas, el organismo requiere fondos internacionales, pues necesita aprovisionarse de 275 mil toneladas de alimentos (valoradas en 224 millones de dólares).
El PMA requiere esa financiación para continuar con sus programas de ayuda en Etiopía hasta fin de año. En total, unos 12,5 millones etíopes sufren las consecuencias de la actual sequía, según datos de la ONU.
Con los fondos de los que dispone ahora, el PMA distribuye alimentos entre 6,4 millones de etíopes, mientras que en Sudán -donde la crisis humanitaria de Darfur ha concentrado buena parte de los esfuerzos internacionales en los últimos años- la reciben 5,6 millones de habitantes.
Sigue a El Espectador en WhatsApp“Esta es la peor crisis en Etiopía desde la sequía de 1994”, declaró Casella. En total, Naciones Unidas considera que en los cinco países del Cuerno de África -Etiopía, Somalia, Kenia, Yibuti, Eritrea- peligra la vida de 17 millones de personas.