Según revelaron fuentes cercanas a la investigación, este lunes 28 de mayo se llevó a cabo la captura de cuatro personas involucradas en la manipulación del sistema de repartos que logró que la demanda presentada por Hyundai Colombia Automotriz S.A, empresa de Carlos Mattos, contra Hyundai Motor Company, de la República de Corea, llegara al Juzgado Sexto Civil del Circuito de Bogotá.
Entre los capturados de encuentran dos ingenieros de la Dirección Ejecutiva de la Rama Judicial y otras dos personas que habrían servido como intermediarias para el cobro del dinero para el redireccionamiento de la demanda, según confirmaron fuentes de la Fiscalía a El Espectador. En diciembre del año pasado se anunció la investigación a tres funcionarios judiciales por tales irregularidades. Se trata de Dagoberto Rodríguez Niño, oficial del Juzgado Sexto Civil del Circuito de Bogotá; Edwin Fabián Macías Castañeda, exempleado del mismo despacho; y Wilmar Andrey Casas Mendoza, actual empleado de la Rama Judicial.
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Precisamente el pasado 16 de mayo, se capturó al ingeniero Edwin Enrique Angulo, quien habría manipulado el sistema de reparto en los juzgados para favorecer a la empresa colombiana frente a Hyundai Motor Company, de Corea. Durante las audiencias se le imputaron los delitos de concusión e interés indebido en la celebración, de los que solo aceptó concusión. El juez le impuso casa por cárcel.
“La Fiscalía tiene evidencia documental de que fue manipulado el reparto de asignación de denuncias y de demandas y que (…) fueron enrutadas hacia el Juzgado Sexto Civil del Circuito de Bogotá”, aseguró el fiscal Néstor Humberto Martínez en su momento. Este pleito inició cuando después de 24 años las empresas Hyundai Colombia Automotriz S.A, del colombiano Carlos Mattos, y Hyundai Motor Company, de la República de Corea, decidieron separarse.
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A finales del 2016, había 9.143 carros nuevos represados en zonas francas sin poder ser vendidos en el país, medida cautelar impuesta por el Juzgado Sexto Civil a petición de Mattos. Tras esta decisión, una publicación de la Revista Semana cuestionó duramente al juez que había emitido tal decisión, es decir el jurista Reinaldo Huertas, quien días después habría pagado un carro de contado por un valor de $73 millones. El juez Huertas ratificó en ese momento que su medida cautelar, más que beneficiar a un particular, pretendía cuidar el statu quo de una larga relación comercial mientras se resolvía la demanda de Mattos contra la matriz coreana.