La sequía de los ríos voladores

Y súmele al consumo compulsivo los perros. Esa sí, una insensata moda con unos niveles de daños e impactos ambientales develados en numerosas revistas científicas e indexadas. Los perristas los quieren desconocer amparados en supuestos beneficios emocionales q´ no se ven, pues a mayor número de perros más intransigencia social en esta Colombia inefable. Solo considerando el consumo de carne en el suculento pienso perruno se tienen millones de hectáreas deforestadas y aumento del cambio climático

Desde que los conservadores nieguen el Cambio Climático habrá muy poco por hacer. Y menos en Colombia donde son muchísimo más de la mitad dada en cualquier país. Y por qué son tantos? Simplemente porque en 200 años han asesinado sistemáticamente a los progresistas, y, por tanto, son quienes más se han reproducido, y que para ajustar consumen y contaminan como norteamericanos (por esquilmadores de recursos y activos mediante bloqueo de la libertad de competencia en justa lid).

Faltan políticas públicas de recicilaje y tratamiento de desechos orgánicos.

Olvidan agregar a los neo empresarios. Cabezas del desastre por su ambición de ganancias. Merecen la cruz de Boyaca esos bellacos

El Espectador debe abrir esta columna a la opinión publica por su importancia