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El Gobierno se prepara para ponerle la cara a uno de los peores resultados que ha obtenido en materia de lucha contra los cultivos de uso ilícito. Según dijo el ministro de posconflicto, Rafael Pardo, Estados Unidos revelará que en Colombia hay cerca de 180 mil hectáreas sembradas con mata de coca, una cifra sin precedentes que plantea un retroceso. Sin embargo, ante la contundencia y frialdad de los números, Pardo ya dejó claro que Colombia no se basa en este informe sino en el que realiza anualmente la ONUDC. (Lea: ¿Por qué Colombia volvió a ser el mayor productor de coca en el mundo?)
“Hay dos mediciones sobre el área de coca, una es la que realiza ONUDC, que para 2015 identificó 96 mil hectáreas. La otra medición la hace la oficina de drogas de Estados Unidos que el año pasado reportó 157 mil hectáreas. Hay una diferencia muy grande. ¿Por qué esa diferencia? Porque la ONU hace un censo, monitorea durante todo el año todo el territorio y hace un censo basado en aerofotografía y verificaciones en terreno”, explicó Pardo.
El alto funcionario afirmó que, por el contrario, la medición de Estados Unidos busca es una injerencia sobre la base de un muestreo, por eso nos parece más precisa en términos de regiones y de procedimiento.
Lo que sí tuvo que reconocer Pardo es que las cifras en las dos mediciones suben, y que el crecimiento de los cultivos de mata de coca está desbordado en el país, justo en el momento en que el Gobierno y las Farc firmaron, en noviembre, un acuerdo de paz que tiene un claro foco sobre el tema de narcotráfico.
Por eso, señaló que “en términos de los cultivos, la meta para este año es reducir o afectar 100 mil hectáreas. La primera parte se hará a través de la implementación del acuerdo de paz que este año tendrá actuación en 40 municipios, que representan más de la mitad de la coca sembrada en Colombia, esta es la sustitución manual. Las otras 50 mil hectáreas serán por erradicación forzada”.
Lo claro es que difícilmente Colombia podrá explicar los pésimos resultados en la medición que realiza el Gobierno de Estados Unidos, como ya lo indicó Pardo, llegará a cerca de 180 mil hectáreas.
Un asunto espinoso pues es claro que uno de los principales aliados de Colombia es Estados Unidos, lo fue en la lucha contra la guerrilla y los carteles de droga con el denominado Plan Colombia y para el Gobierno es fundamental continuar con este apoyo ahora que fue presentado el Plan Paz, para el posconflicto.
Con el Gobierno Obama se habló de un apoyo cercano a los $390 millones de dólares para la paz. Sin embargo, es claro que el principal interés de Estados Unidos es la lucha contra las drogas y los resultados dejan mucho que esperar. Habrá que esperar que implicaciones puede tener en la era Trump.