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Tras casi cinco años fuera del servicio público, el exvicepresidente Angelino Garzón fue nombrado por el presidente Iván Duque como embajador plenipotenciario en Costa Rica. El decreto fue firmado por el mandatario el pasado 28 de noviembre y una vez se cumpla con los trámites de la Cancillería colombiana y las autoridades costarricenses, Garzón tomará posesión del cargo.
Ahora el decreto deberá ser notificado al exvicepresidente, quien deberá responder positivamente aceptando el nombramiento. Luego será posesionado, primero en Colombia y después en Costa Rica. Lo cual ocurrirá la segunda semana de enero de 2019. La situación hace recordar que, en febrero de 2014, cuando Garzón renunció a su cargo como vicepresidente de la República, el entonces presidente Santos le ofreció la embajada en Brasil. Cargo que Garzón rechazó argumentando que su perro pastor alemán era muy peludo y no se adaptaría al clima brasileño.
Angelino Garzón no aceptó la embajada en Brasil
Hace un mes, cuando se conoció que el exvicepresidente sería nombrado embajador en Costa Rica, Blu Radio lo entrevistó y Garzón reveló la verdadera razón que lo llevó a rechazar el ofrecimiento de Santos en la embajada de Brasil: “Lo del perro fue un pretexto. Lo fundamental fue cuando expresidente Juan Manuel Santos presentando su fórmula presidencial de Germán Vargas Lleras, estoy hablado de febrero de 2014, manifestó que ahora sí íbamos a tener vicepresidente en Colombia. Como si yo me la hubiese pasado los cuatro años como vicepresidente rascándome la barriga”.
Y es que a mediados del primer mandato de Santos las relaciones con su vicepresidente se agrietaron. En 2011 tuvieron un primer enfrentamiento, cuando Angelino Garzón se enfrentó a Planeación Nacional por la metodología para medir la pobreza en Colombia. “Es absurdo pensar que un colombiano no es pobre porque gana más de 190 mil pesos al mes o vive en una familia que recibe más de 790 mil pesos en treinta días”, dijo el entonces vicepresidente Garzón.
Vicepresidente critica a Planeación Nacional
La réplica vino del propio presidente Juan Manuel Santos, quien lo desautorizó afirmando que no está bien que el gobierno muestre en público sus diferencias. Bajo la premisa de que la ropa sucia se lava en casa, Santos le dijo a Garzón: “el funcionario que quiera discrepar lo puede hacer dentro del Gobierno, pero no en público, si lo quiere hacer en público pues no puede ser parte del Gobierno, tendría que retirarse y hacer su reclamo o su crítica por fuera. Así opera cualquier democracia”.
El vicepresidente no es empleado del Gobierno: Angelino Garzón
Garzón, por su parte, le contestó que no tiene por qué renunciar a un cargo para el que fue elegido por voto popular, que el vicepresidente no es empleado del Gobierno y que defenderá siempre su derecho a opinar. “Defiendo como un gato patas arriba que este derecho lo tenga todo ciudadano. Si el presidente de la República me quita las funciones me tendré que ir con el cargo a la casa pero sin perder el derecho a opinar”, concluyó. Así pues, el polémico Angelino Garzón, quien fue dirigente sindical, presidente de la Unión Patriótica, constituyente, uribista, santista y ahora duquista, llega como embajador a Costa Rica.
Por -Redacción Política
