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A pesar de ser partido de gobierno, los conservadores no han acompañado al Ejecutivo en varias de sus propuestas en el Legislativo, una de las más importantes ha sido la reforma a la salud. La presión de dicha colectividad y otras tradicionales hicieron que el gobierno Petro revaluara varias de sus posiciones en dicho proyecto. Ahora, los godos estarían buscando lograr un mismo efecto con la reforma laboral.
Tras una reunión de bancada en la mañana de este miércoles, anunciaron que no acompañarán el proyecto. “La bancada del Partido Conservador toma distancia del texto de reforma laboral presentado por el gobierno nacional”, anunció la colectividad liderada por el senador Efraín Cepeda.
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De acuerdo con los del trapo azul, la reforma no atiende “las prioridades en relación al mercado laboral”. Para los conservadores, el texto de gobierno hace “el régimen laboral más oneroso, rígido y poco competitivo”. Supuestamente, esto haría que los indicadores de desempleo e informalidad aumenten.
Ante la decisión, se pidió al Ejecutivo y a las otras bancadas que se abran espacios de diálogo y concertación “en la búsqueda de un texto equilibrado entre lo social y el crecimiento económico, que vaya en sintonía con las verdaderas necesidades que el país reclama”.
En este sentido, la colectividad aseguró que están comprometido con la generación y formalización de empleo y “el fortalecimiento del tejido empresarial”, que estaría conformado en un 90% por las micro y pequeñas empresas.
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“Como Partido continuaremos en la defensa de los desempleados, trabajadores informales y especialmente al emprendimiento y las MiPymes en el sector empresarial. Debemos entender que los desempleados e informales son los más vulnerables, por lo que son nuestra prioridad”, reseñó la colectividad tradicional.
De esta forma, los conservadores se convierten en el primer partido tradicional de gobierno que le dice no a la reforma laboral tal como está radicada. Es necesario esperar a ver qué sucede con las otras colectividades, pues un devenir parecido tuvo la reforma a la salud. Los tradicionales se bajaron de su apoyo y al final el gobierno tuvo que aceptar amplios ajustes.