Falta más de un año para la contienda presidencial de 2022, pero desde ya se tiene entre los pronósticos que la actual vicepresidenta, Marta Lucía Ramírez, sea una de las aspirantes a la primera magistratura del Estado. Sin embargo, no se tiene claro en qué momento esta debe dejar el cargo para no inhabilitarse. Los conceptos son varios y todo se debe a la forma en la que Ramírez llegó a ser la segunda del Ejecutivo.
Según la Reforma de Equilibrio de Poderes, llevada a cabo en 2015 y en la que se introdujo un artículo para favorecer las aspiraciones presidenciales de Germán Vargas Lleras, al cargo de vicepresidente se pusieron las mismas inhabilidades para aspirar que las que tenían ministros, magistrados, procurador, defensor del pueblo, fiscal general, entre otros altos cargos en el Estado. Esto quiere decir, según el artículo 197 de la Constitución, que solo podía ser candidato a la Presidencia si dejaba su cargo un año antes del proceso electoral.
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Bajo esta premisa, la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez tendría plazo hasta el 29 de mayo de 2021, fecha de la primera vuelta presidencial, para abandonar el cargo sin inhabilitarse. Sin embargo, en su caso particular, son otros los factores que siembran dudas sobre esa fecha.
Varios analistas han señalado que solo tendría hasta este sábado para renunciar, pues el 13 de marzo de 2022, fecha designada para la realización de las elecciones a Senado y Cámara de Representantes, se tiene establecida también para la realización de las consultas interpartidistas, en las que se supone que Ramírez participará para sacar el candidato que represente a los sectores de derecha y centro-derecha.
Sin embargo, si se lee el artículo 197 de la Constitución, este solo establece que no podrá ser elegido como presidente o vicepresidente “el ciudadano que un año antes de la elección haya tenido la investidura de vicepresidente”. Esto da a entender que el periodo de inhabilidad para Marta Lucía Ramírez solo comenzaría a correr a finales de mayo de este año.
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No obstante, la Ley 1475 de 2011 (por la cual se adoptan reglas de organización y funcionamiento de los partidos y movimientos políticos, de los procesos electorales y se dictan otras disposiciones), podría complicarle el panorama a la dirigente política, bajo la prohibición de la doble militancia.
Según esta prohibición, consagrada en el artículo 2 de dicha ley, “los candidatos que resulten electos, siempre que fueren inscritos por un partido o movimiento político, deberán pertenecer al que los inscribió mientras ostenten la investidura o cargo, y si deciden presentarse a la siguiente elección por un partido o movimiento político distinto, deberán renunciar a la curul al menos doce (12) meses antes del primer día de inscripciones”.
En el caso de Ramírez, aunque aspiró como precandidata presidencial por el movimiento “Por una Colombia honesta y fuerte” -que recogió firmas para ella-, como vicepresidenta figuró en el tarjetón y en los formularios de inscripción en representación del Centro Democrático. Esto quiere decir que figura como militante del partido de gobierno y en su aspiración no solo juegan las reglas de la inhabilidad por el cargo, sino por doble militancia.
Es decir que, de renunciar en mayo, existe la posibilidad de que la vicepresidenta tenga que presentarse obligatoriamente por el Centro Democrático a la contienda presidencial. Esto sería un duro golpe contra los conservadores, que han venido barajando la opción de que esta sea su ficha para llegar a la Casa de Nariño en 2022.
Según el exmagistrado del Consejo Nacional Electoral (CNE), Armando Novoa, basado en el artículo que prohíbe la doble militancia, ella tendría que haber renunciado un año antes de la fecha del primer día de inscripción de candidatos a presidente. Aunque todavía no se conoce el calendario electoral oficial, normalmente esta fecha cae la última semana de enero.
Esto quiere decir que a Marta Lucía Ramírez ya se le habría hecho tarde para renunciar, si su intención es aspirar por otro partido o movimiento que no fuese el Centro Democrático. Además, señaló Novoa, en los procesos de consultas interpartidistas también juegan las reglas de la doble militancia, por lo que la vicepresidenta estaría limitada a aspirar por las banderas del uribismo.
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Sin embargo, la situación de Ramírez no es clara y esto se debe a que no hay mayores antecedentes sobre su situación, dado que el único vicepresidente que fue candidato en la siguiente elección fue Germán Vargas Lleras. Frente a pronunciamientos del Consejo de Estado, solo hay dos fallos relacionados sobre el tema, uno de ellos que vincula a la propia Marta Lucía Ramírez
En 2019, al alto tribunal administrativo llegó una acción de nulidad en contra de la elección del presidente Iván Duque y Ramírez. Según el demandante, la vicepresidenta había incurrido en doble militancia pues se presentó por el movimiento “Por una Colombia honesta y fuerte” como precandidata presidencial y luego como fórmula vicepresidencial figuró por el Centro Democrático.
El cuestionamiento fue que Ramírez habría violado el artículo 107 de la Constitución que prohíbe “que quien participe en las consultas de un partido o movimiento político o en consultas interpartidistas, se inscriba por otro en el mismo proceso electoral”. Sin embargo, el Consejo de Estado determinó que no fue así, pues dicha prohibición es para que no se irrespeten los resultados y los perdedores busquen otros partidos para llegar a las elecciones presidenciales. En este caso, según el tribunal, no se desconoció el resultado, sino todo lo contrario: Iván Duque fue el candidato presidencial y Marta Lucía Ramírez lo apoyó como fórmula vicepresidencial.
En este proceso, la Procuraduría dio una justificación a favor de los actuales presidente y vicepresidenta frente a la inscripción únicamente por el Centro Democrático. Según el concepto del Ministerio Público, todo se trató de un olvido porque la inscripción no era solo por el partido, sino que realmente era por el Centro Democrático y los movimientos “Por una Colombia Honesta y Fuerte” y “La Patria en Pie”, este último el movimiento de Alejandro Ordóñez.
En ese concepto, la Procuraduría concluyó que “en atención a lo anterior se puede afirmar que la inscripción de la demandada como candidata a la Vicepresidencia de la República se hizo a nombre, no solo del Centro Democrático, sino también del movimiento ‘Por una Colombia Honesta y Fuerte’”. Esto podría ser usado por la actual vicepresidenta para decir que nuevamente recogería firmas a nombre de “Por una Colombia Honesta y Fuerte”, por lo que no estaría incurriendo en doble militancia y se podría quedar en su cargo hasta mayo.
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Otro fallo que podría aclarar esta situación es el de la acción de control de nulidad que presentó Alirio Uribe contra Germán Vargas Lleras por lanzarse por firmas en 2018, con el movimiento #MEJORVARGASLLERAS, cuando era militante de Cambio Radical e incluso era vicepresidente en representación a ese partido. Aunque Vargas Lleras renunció en marzo, para Uribe, lo hizo tarde y tenía que, obligatoriamente, presentarse por Cambio Radical.
En esta ocasión, la defensa del exvicepresidente fue que no era militante de Cambio Radical. Este punto fue secundado por el Ministerio Público, que señaló que, a pesar de que ese partido hizo parte de la coalición que sacó a Santos presidente y a Vargas Lleras vicepresidente, este último no estaba vinculado necesariamente con dicha colectividad.
Sin embargo, el Consejo de Estado no entró a pronunciarse de fondo sobre la demanda de Alirio Uribe y simplemente la desestimó, dado que la acción que radicó fue en contra del CNE por avalar el logo y la campaña para recoger firmas a favor del candidato. Para el alto tribunal, no hubo irregularidades, dado que esa era la labor del CNE y este no podía entrar a evaluar si hubo o no doble militancia. Al solo fallar en este sentido, el Consejo de Estado perdió la oportunidad de pronunciarse sobre las inhabilidades que tendría que sortear el vicepresidente si quisiera aspirar a la Pesidencia en las elecciones siguientes. Y, ahora, no se tiene claridad del que camino que debe tomar Marta Lucía Ramírez de cara a 2022.