El aniversario 50 del Eln trajo noticias importantes para la paz de Colombia. Pero no porque se haya anunciado el inicio formal de una mesa de diálogos con esta guerrilla, ni porque la agrupación insurgente haya decretado un cese del fuego, como se especuló, sino porque su máximo comandante, Nicolás Rodríguez Bautista, alias Gabino, dio cuenta de las decisiones tomadas por ese grupo subversivo en el marco de su V congreso, del cual salió una conclusión entreverada: el Eln está listo para unirse al diálogo, buscar la paz y pasar a la política.
El comunicado estuvo acompañado con entrevistas a los principales comandantes de esta guerrilla. Y de ellas queda clara una cosa: Carlos Antonio Marín, conocido como Pablo o Pablito, comandante del Frente de Guerra Oriental, que opera en Arauca, entra al Comando Central (COCE), máxima instancia del Eln. Esta decisión es vista como un mensaje de unidad de todas las estructuras de esta guerrilla y resulta determinante para motivar la decisión de buscar la paz por parte de este grupo.
El discurso leído por Gabino arranca con una frase política de carácter autojustificatorio de la lucha elena, habla de política internacional y plantea que América Latina camina por sendas revolucionarias. Habla de los procesos democráticos de Ecuador, Argentina, Brasil, El Salvador, Cuba, Venezuela o Bolivia. “El impetuoso viento de cambio que recorre el continente sigue refrescando los caminos de revolución y nos convoca a un mayor compromiso para lograr la unidad popular e insurgente”, refiere el manifiesto.
“El Gobierno ha planteado su disposición a poner fin al conflicto armado y para ello ha convocado a la insurgencia. Asistimos a este diálogo para examinar la voluntad real del Gobierno y del Estado colombiano; si en este examen concluimos que no son necesarias las armas, tendríamos la disposición de considerar si dejamos de usarlas. El gobierno de Santos tiene la disyuntiva de persistir en su política de guerra y pacificación o atreverse a un verdadero camino de paz deseado por todos los colombianos”, agrega el documento.
De otro lado, la página web del Eln amaneció llena de material con el que se puede terminar de armar el rompecabezas. Allí aparece una entrevista titulada “La paz no es una zanahoria”, en la que Gabino cuenta que el anterior congreso nacional se hizo en 2006 y que en el de este año se determinó que la “lucha popular requiere dar un salto que permita que sus organizaciones se posicionen como sujetos políticos en la vida del país”. En otro aparte de la entrevista, Gabino afirma: “Nunca terminarán los conflictos en una sociedad por su misma naturaleza humana, lo que hay que superar radicalmente es que tales conflictos nos lleven al enfrentamiento y a la violencia, ellos deben resolverse por las vías del diálogo franco”.
Finalmente, Gabino sostiene que “si los diálogos que hoy desarrollamos con el Gobierno llegan a acuerdos satisfactorios, que es lo que esperamos, el Eln continuaría luchando dentro de las definiciones que dichos acuerdos tracen, porque los acuerdos de paz son un punto de partida para seguir luchando por todos los objetivos y los sueños que tiene el pueblo colombiano. Nosotros siempre hemos dicho que si en Colombia se llegara a abrir los cauces democráticos, para que las mayorías puedan luchar desde dichos espacios, sin necesidad de recurrir al derecho de la rebeldía, nadie se verá forzado a empuñar las armas, ese es el momento que deseamos y esperamos, es por ello que acudimos a los diálogos con el Gobierno, con muchas expectativas”.
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@AlfredoMolanoJi