Hasta hace un tiempo, Sebastián Caicedo tomaba decisiones de manera práctica. Asumía todo tipo de personajes que lo retaran actoralmente y en general, estaba abierto a esas posibilidades. Hoy es distinto, el actor nacido hace 43 años en Cali, ahora piensa con detenimiento y somete sus decisiones a un proceso espiritual. Caicedo, quien se convirtió al cristianismo tras una crisis personal y lo que él demonina “un gran desierto que viví”, ha cambiado su forma de vida desde entonces.
Se casó hace ocho meses con Juliana Diez, una empresaria, también cristiana, con quien está dedicado a los negocios. Esto y lo ahorrativo que ha sido en su carrera artística, le han permitido una base económica que hoy le dan la posibilidad de solo aceptar lo que vaya en sintonía con lo que cree.
Sebastián, quien estará en Bogotá la próxima semana, ya que fue nombrado embajador de la sexta edición del Festival Internacional de Cine Cristiano de la ciudad (FICCBOG), habló sobre sus expectativas personales y profesionales, así como su regreso a la pantalla.
¿Por qué ser embajador del FICCBOG?
Para mí ser el embajador del festival es una respuesta a las muchas oraciones que hice. Para nadie es un secreto que en mis 25 años de carrera , he tenido la oportunidad de hacer cine, series y novelas; actuar en Colombia, en Estados Unidos y en México. Sin embargo, hace tres años cuando conozco a Jesús y por la manera como Él se me presenta, que fue mi en peor desierto, yo le decía: ‘Señor, quiero seguir actuando y trabajando, pero quiero hacerlo para ti’. Obviamente, la gente dirá pues se volvió loco, porque no hay mucho campo de acción para un actor para hacer este tipo de producciones. Hoy en día lo defino de esta manera y es que mi propósito es poderle servirle desde mis dones y talentos. Ser embajador es solo el primer paso es darme cuenta que las promesas de Dios sí se cumplen.
¿Por qué Sebastián Caicedo ha rechazado proyectos en pantalla?
En este tiempo ¿le han hecho ofrecimientos que ha rechazado?
Le he dicho que no a muchas cosas de trabajo. De México me han llamado, para un par de novelas aquí en Colombia, y en Estados Unidos, de Telemundo. Les he dicho que no. No me importa el valor que me paguen, en este momento, no persigo ni fama, ni dinero, persigo realmente propósito.
¿Eso qué significa?
Cuando creemos en Dios, en sus promesas, en los tiempos de Él, esperamos el tiempo. A veces queremos los resultados en nuestras fuerzas, que las cosas sean ya. De una u otra manera siento que he sido paciente en medio de mis luchas, en medio de mi proceso he descansado en él, en soltar el control. Ya esa ansiedad de antes de tener una novela o un personaje no está.
¿De qué vive entonces?
Dios me ha dado oportunidad de hacer otros proyectos, de no depender económicamente de la actuación, hoy puedo decir no vivo la actuación. Tengo mis marcas, estamos abriendo una nueva con Juli.
¿Cuáles son las características de esos proyectos que sí aceptaría?
Soy consciente que Dios quiere que yo sea luz en la oscuridad, o sea, no estoy diciendo que voy a dejar de actuar, que no voy a volver a hacer alguna novela, pero hay personajes o realities como ‘La Casa de los famosos’, que puedo decir no he aceptado. Y otras cosas en México, no porque no quiera, sino porque en este momento tengo prioridades. Mi esposa, mi matrimonio, mi empresa, enfocado en mis marca, lo que estoy creando con mi esposa . Ahora sé que va a llegar algún momento en que podré hacer alguna película o una serie en México, en Bogotá, pero siento que no ha llegado el momento. Como dije, no estoy corriendo por esa fama o por ese dinero, estoy tranquilo y sé que descanso en Dios.
Sebastián Caicedo rechazó ‘La Casa de los famosos’
.¿Por qué no ha aceptado ‘La Casa de los famosos’?
Me la ofrecieron aquí y en Estados Unidos. Va en contra de mis valores. No hay que ser muy inteligente para darse cuenta que ahí lo van llevando a uno. Además, sería el más aburrido, estaría diciendo todo el tiempo eso no lo hago, eso no me interesa. Siento que no me edifica ni voy a edificar a nadie estando allá.. Tampoco me interesa tener algún conflicto con nadie.
Algunos dicen que no aceptan esos realities porque se conocen y no quieren despertar sus propios demonios…
Es parte de la protección no aceptar ese tipo de retos. Sí, obviamente somos humanos, la carne existe, la lucha es día a día, entonces, pues ¿para qué tentar eso? Digamos que estamos en un momento de un proceso, de estar saliendo adelante y para mí sería como echar para atrás.
¿Qué otras restricciones tiene para trabajar en pantalla?
No quiero entrar detalles porque la verdad tampoco quiero herir susceptibilidades. Estamos en un momento donde cualquier cosa que uno diga será utilizado en su contra. Simplemente el Espíritu me lo dirá cuando llegue una oferta, en ese momento oraré, le pediré discernimiento a Dios y miramos hasta dónde podemos. Me encanta hacer los malos, los he hecho casi siempre y me divierto mucho, pero lo más importante ahora es que sea un papel que me edifique. Estoy tranquilo, estoy en el momento más pleno de mi vida y como no estoy persiguiendo esa fama y ese dinero, esa necesidad de figurar, entonces las cosas fluyen y llegan en el tiempo que tienen que llegar.
¿Hay arrepentimientos por el pasado?
Yo me arrepiento de no haberme acercado a Dios más muchos años antes, porque si me venía llamando y yo me le estaba haciendo loco, es lo único que me tengo que arrepentir, de resto soy un mortal como cualquier otro, que he pecado, que he cometido errores, que muchas veces he hecho las cosas mal, pero lo importante es que Dios tenía una segunda oportunidad para mí y la estoy tomando y estoy queriendo resarcir muchos de mis errores.Pasado tenemos todos y lo más importante es no centrarse en el pasado, sino en el presente y en lo que está haciendo Dios en mí, porque Dios no llama a las ovejas buenas, Él llama a las malas, a las que quiere transformar y precisamente nuestros testimonios son los que le muestran a las otras personas que sí es posible
.¿Hay planes de ser padre?
Claro, si quiero ser papá, quiero agrandar la familia. Con Juli anhelamos ojalá una niña, estamos esperando que sea en el tiempo de Dios.
Sebastián Caicedo en cine
Sebastián regresa a la pantalla como la voz de Pedro en la película animada ‘Jesús la luz del mundo’ que se estrena la semana próxima. “Pedro dudó, falló, pero terminó siendo una roca. Yo también fui esa oveja perdida por la que Dios dejó las 99. Y hoy me usa para hablarle a otros”, dijo sobre el rol.
Sebastián abrió el 29 de agosto la sexta edición del FICCBOG como su embajador, el festival se realizará entre el 2 y el 6 de septiembre en Bogotá.