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A medida que distintos estados en Estados Unidos han legalizado el uso recreativo de la marihuana (cannabis), se han popularizado unos productos llamados “comestibles de marihuana”, que vienen en forma de gomitas, dulces o galletas. Entre 2017 y 2021, cerca de 7.000 niñas y niños pequeños en ese país consumieron accidentalmente uno de esos productos, resultando en que algunos tuvieran que ser ingresados al hospital, encontró un nuevo estudio publicado en la revista Pedriatics.
El número de niños menores de cinco años reportados por haber ingerido por error un producto de cannabis entre 2017 y 2021 aumentó en más de un 1.300%. En 2017, se registraron 200 menores de edad, mientras que en 2021 se reportaron 3.050 casos.
El incremento en el número de casos, indican los autores del nuevo estudio, se podría relacionar con el aumento de estados en donde el consumo recreativo de marihuana es ahora legal. Hasta finales de mayo de 2022, este consumo era legal en 18 estados del país, frente a los ocho donde era permitido en 2017. (También puede leer: China critica el regreso de los test covid-19 a los viajeros con origen en ese país)
“La mayoría de las exposiciones (97,7%) se produjeron en un entorno residencial. El 70% de los casos seguidos hasta un desenlace conocido presentaban depresión del sistema nervioso central. De todos los casos notificados, el 22,7% de los pacientes fueron ingresados en el hospital”, encontraron los autores del estudio.
Aunque ninguno de estos casos analizados fue fatal, la investigación advierte que una dosis muy alta en niños pequeños puede ser peligrosa. El 8 % de los casos incluidos en el estudio tuvo que ser ingresado a cuidados intensivos, mientras que la mediana de edad de los niños afectados fue de 3 años.
Los síntomas más presentes en estos casos fueron depresión del sistema nervioso central (incluido el coma), taquicardia (latidos cardíacos anormalmente rápidos) y vómitos. Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés), los “comestibles de marihuana” tienen riesgos distintos a fumar cannabis, entre otras cosas, porque los efectos de intoxicación duran más tiempo y porque tardan entre 30 minutos y dos horas en tomar efecto, lo que puede causar un sobre consumo de estos.
“El consumo de marihuana puede hacer que los niños se pongan muy enfermos. Pueden tener problemas para andar o sentarse o les puede costar respirar”, agregan los CDC. (Le puede interesar: El uso frecuente de redes sociales podría generar cambios en el cerebro de los niños)
Los investigadores añadieron que, aunque el aumento en casos sí podría relacionarse a la legalización de la marihuana en varios estados, hay otras razones que pueden haber contribuido, como la pandemia, que ha hecho que los niños pasan más tiempo en casa y tengan más oportunidades de encontrar dulces con cannabis, o que los médicos tienen más experiencia en el tratamiento e identificación de estos casos.
Los científicos escribieron que, teniendo en cuenta la situación, recomendaban que los “comestibles de marihuana” se conserven en un lugar desconocido para los niños, o de difícil acceso, y en un recipiente bien cerrado. De ser posible, agregan, deberían ubicarse fuera de la cocina para estar alejados de otros alimentos.
Pidieron también que los productos se vendan en envases opacos, difíciles de abrir para los niños, con un mensaje de advertencia y el número telefónico del centro nacional de toxicología.
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