Febrero será un mes clave para la reforma que el gobierno de Gustavo Petro plantea para modificar el sistema de salud colombiano. Durante ese mes la ministra de Salud, Carolina Corcho, presentará el texto oficinal al Congreso y se realizarán cinco audiencias públicas regionales para su discusión. La primera de ellas, precisamente, comenzará en Chocó en las próximas semanas, en medio de un ambiente en el que han surgido dudas por la participación en la construcción del texto oficial.
El viernes pasado la ministra Corcho se refirió a ese proceso: “El origen de la reforma la salud es un origen de la sociedad civil, de las organizaciones sociales, de gremios médicos y pacientes. Hemos hecho el máximo esfuerzo, aun sin ser radicada, de discutir lo más ampliamente posible esta reforma a través de diversas audiencias públicas convocadas por el Congreso de la República con una participación multitudinaria de todos los actores del sistema de salud en todas las regiones”.
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Según Corcho, se han realizado seminarios y discusiones de una reforma que para la ministra “antecede al gobierno” y que ha tenido una discusión muy amplia. De hecho, para el gobierno “no hay reforma en la historia republicana de Colombia que se haya discutido más”. Pero no todos piensan lo mismo. La semana anterior se conocieron dos comunicados de diversas organizaciones y gremios del sector de salud que, aunque con tonos distintos, dejaban entrever lo mismo en un punto: a pocas semanas de la radicación del proyecto, no conocen un texto oficial y definitivo.
Once organizaciones nacionales de pacientes y de EPS, además de grupos académicos (entre los que están, por ejemplo, Acemi, Gestarsalud, el Grupo Economía de la Salud de la U. de A. y Pacientes Colombia), publicaron un documento el jueves pasado en el que le piden al Ministerio conocer el texto de la reforma, previa su discusión por el Congreso. “Todas las voces acá representadas tenemos mucho que aportar en esta discusión y hemos expresado nuestra disposición al diálogo social, la cual reiteramos con el mayor ánimo propositivo y para beneficio de nuestro país”.
No son los únicos que han señalado que no conocen el proyecto. Otro grupo de organizaciones entre las que se encuentran la Asociación Colombiana de Sociedades Científicas, la Academia Nacional de Medicina y la Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación, entre otras, publicaron un comunicado en el que reconocen una serie de coincidencias con lo que se sabe del proyecto del gobierno, si bien señalan en su punto 5 que también desconocen el texto oficial.
“… Estamos a la espera de conocer el texto final de la Reforma a la Salud a fin de aportar constructivamente en su análisis, concertación y discusión”, finalizan las anteriores organizaciones.
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Las críticas han venido también desde líderes de pacientes y exfuncionarios del Ministerio de Salud, especialmente del gobierno anterior. Denis Silva, vocero de Pacientes Colombia, un movimiento social que agrupa a 195 organizaciones de pacientes en Colombia, se refirió al tema: “No es cierto que dentro de los conversatorios que usted (Carolina Corcho) ha hecho haya socializado algún texto de la reforma. En Colombia hay cerca de 800 o 1.000 organizaciones de pacientes. Solo dos participaron y estas fueron elegidas por usted. Eso viola el principio de participación”.
Por otra parte, Fernando Ruiz, exministro de Salud, le pidió al Congreso certificar cuántas audiencias públicas se han hecho sobre la reforma (”de un texto” que, apuntó Ruiz, “no se conoce”). Otros exfuncionarios como Diana Cárdenas, exviceministra de Protección Social, y Julián Fernández, exdirector de Epidemiología, han solicitado públicamente que el Ministerio publique el proyecto y socialice sus puntos más importantes de su radicación.
Durante 2022 se conocieron extraoficialmente un par de borradores de la reforma que circularon entre funcionarios, exfuncionarios, líderes del sector y periodistas. Sin embargo, en su momento el Ministerio de Salud negó que se tratara de documentos oficiales y se desligó de ellos. Si bien no se conoce aún el documento, sí se sabe de otros proyectos de reforma (como el que presentó hace unos días Pacientes Colombia) y que cursarán de forma paralela en el Congreso al del Gobierno.
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Finalmente, y para confirmar que febrero puede ser un mes clave para esta reforma, el propio Gustavo Petro se refirió en Twitter a la agenda de proyectos que su gobierno planea presentar: “Las reformas que se presentarán al Congreso en febrero buscan cambiar el país, generar justicia social y son el acumulado de las luchas sociales de Colombia. No dudo que tendrán opositores en quienes no quieren los cambios La plaza pública también es un lugar de discusión”. Con esto último se refiere a una convocatoria a una movilización en apoyo al gobierno que está fechada para el 14 de febrero.