Publicidad

Irán busca derrotar las sanciones de EE.UU. a través de Apple

El gobierno quiere forzar a la empresa a abrir una representación oficial en el país para aligerar así las prohibiciones que aún tienen algunas compañías para hacer negocios en suelo iraní.

International Campaign for Human Rights in Iran - Global Voices
18 de agosto de 2016 - 10:53 p. m.
La tienda principal de Apple en San Francisco. / Bloomberg
La tienda principal de Apple en San Francisco. / Bloomberg

Las autoridades de Teherán han obligado a Apple a abrir una tienda en Irán si no quiere enfrentarse a la prohibición de vender sus productos a nivel nacional. El ultimátum, según las autoridades, tiene como objetivo captar los ingresos fiscales perdidos de los millones de iPhone introducidos ilegalmente en el país cada año, pero los expertos determinan que el objetivo real es reducir las sanciones de EE.UU. que actualmente restringen los flujos de inversión en Irán. (Lea "Cómo un canal indio de YouTube se volvió un referente en contenido educativo")

“Si (Apple) no registra una oficina de representación oficial en Irán, todos los teléfonos producidos por esta firma serán confiscados de las tiendas», dijo Abbas Nakhaei, director del Grupo Operativo Iraní contra el contrabando, en una entrevista con la agencia de línea dura Tasnim News. (Lea "Irán podría desbloquear Twitter para usarlo como un arma de guerra")

Traer a Apple de manera oficial al país sería una gran victoria para Irán, quien ha argumentado que los beneficios de firmar el acuerdo nuclear y la flexibilización de las sanciones internacionales no han dado lugar a la inversión extranjera esperada en el país. (Lea "El número uno")

Irán puede vender su petróleo al mundo y las empresas no estadounidenses tienen ahora la libertad de establecer sus tiendas en el país, pero a las empresas de EE.UU. (incluyendo algunos negocios con demanda alta) todavía se les prohíbe operar en Irán debido a las sanciones que Washington mantiene contra la República Islámica.

Con su ultimátum a Apple, las autoridades de Irán quieren aparentemente acabar con la masiva industria de contrabando de iPhone en el país, la cual priva al gobierno de los ampliamente necesitados ingresos fiscales. Se estima que hay seis millones de usuarios activos de iPhone en Irán, según un informe del 20 de julio del 2016 del diario Donya-e-Eghtesad, aunque la mayor parte de estos teléfonos fueron importados de Dubái.

El objetivo principal del ultimátum, según los expertos, es acabar con las barreras que suponen las sanciones de EE.UU. a Irán. Si a Apple se le pudiera presionar para abrir una oficina en suelo iraní, la empresa se vería obligada a resolver los asuntos técnicos y legales que hoy en día imposibilitan sus operaciones (junto con las de otras empresas) en el país. Teherán se muestra confiada de que otras empresas sigan la línea de Apple. Fijándose en Apple, la República Islámica intenta abrir las puertas del mercado iraní a otras empresas estadounidenses.

Puede que Apple no quiera cumplir, al menos en un futuro próximo, y sería una sorpresa que se arriesgara a sufrir las repercusiones legales y financieras de violar las sanciones sin antes discutir el asunto a fondo con las autoridades estadounidenses.

Washington ha argumentado que las dificultades de Irán a la hora de atraer capital extranjero son un problema de Teherán y culpa al obsoleto sector bancario y al ambiente opaco de los negocios en este país. Sin embargo, las actuales sanciones de EE.UU. contra Irán por abusos en derechos humanos, terrorismo y por un programa de misiles balísticos han ayudado significativamente a desalentar a los inversionistas extranjeros.

Además del ultimátum a Apple, el Grupo Operativo Iraní contra el contrabando dijo que todos los usuarios de iPhone en Irán deben registrar sus teléfonos en las próximas semanas. Cada teléfono móvil tiene un número propio de identidad internacional de equipo móvil (IMEI). Si los usuarios de iPhone no registran ese número antes del 22 de setiembre del 2016, las autoridades dicen que cortarán el servicio a los dispositivos. También se les está pidiendo a los comerciantes que registren todos los iPhone nuevos.

“No se permite a tiendas minoristas vender cualquier marca que no esté registrada en el Ministerio de Industria, Minas y Comercio. [Si venden teléfonos no registrados] se les investigará”, dijo Karimi Khorasani, presidente de la Unión de Comerciantes de Telecomunicaciones.

Los políticos iraníes que defienden estas nuevas medidas se muestran, no obstante, en desacuerdo con los agentes del orden público que se encargarán de implementar la nueva regulación.

La dirección del departamento de Comunicación, Relaciones Públicas del Ministerio e Información anunció un retraso en el registro de teléfonos móviles debido a la falta de preparación. No obstante, Ghassem Khorshidi, portavoz de la sede anti-contrabando de Irán, anunció la puesta en marcha de la ejecución del ensayo con un número determinado de usuarios.

Hace una década, en 2006, el gobierno iraní ya intentó una vez obligar a todos los usuarios de teléfonos móviles a registrar su dispositivo ante el Estado para combatir el contrabando. El esfuerzo fracasó “porque los operadores de móviles se negaron a cooperar”, según Alireza Golestani, vicepresidente del Grupo Operativo Central para Combatir el Contrabando de Productos y el Cambio de Divisas.

Un comerciante de Apple en Teherán que pidió no ser identificado le dijo a la Campaña Internacional por los Derechos Humanos en Irán que los iPhone se venden un 10% más desde que las autoridades iraníes amenazaron con acabar con los productos de Apple.

*La versión original de este texto fue publicada por International Campaign for Human Rights in Iran. Global Voices lo reprodujo con permiso. La traducción es de Antonio Iborra Rovira. Licencia Creative Commons.

Por International Campaign for Human Rights in Iran - Global Voices

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar