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La evolución de la conectividad a internet ha estado marcada por el desarrollo de tecnologías que buscan responder a la creciente demanda de mayor velocidad, estabilidad y calidad en el servicio. En este contexto, dos de las opciones más difundidas en el mercado son el ADSL y la fibra óptica. Aunque ambas cumplen la misma función de proporcionar acceso a la red, se diferencian de manera significativa en la infraestructura que utilizan y en el desempeño que ofrecen a los usuarios.
De acuerdo con la empresa de telecomunicaciones Movistar, el ADSL (Línea de Abonado Digital Asimétrica) emplea la red de telefonía convencional para transmitir datos, lo que implica el uso de cables de cobre. Esta característica limita su capacidad técnica y condiciona la velocidad de navegación.
Por otro lado, la compañía señala que la fibra óptica se ha consolidado como una de las tecnologías más avanzadas en el sector, gracias a que transmite información mediante pulsos de luz a través de filamentos de vidrio o plástico, alcanzando niveles de rapidez y estabilidad que superan ampliamente a las tecnologías anteriores.
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Velocidad y estabilidad de conexión: ¿cuál ofrece mejor rendimiento?
Uno de los aspectos más relevantes al evaluar un servicio de internet es el rendimiento que ofrece en términos de velocidad y estabilidad. En este punto, la diferencia entre ADSL y fibra óptica resulta evidente. Según la información de la empresa de telecomunicaciones, el ADSL alcanza velocidades máximas cercanas a los 24 Mbps, mientras que la fibra óptica puede superar ampliamente esa cifra, llegando a 1 Gbps o incluso más, dependiendo del plan contratado y la infraestructura disponible.
El desempeño del ADSL, además, está condicionado por factores externos como el estado del cableado de cobre, la distancia entre el hogar y la central telefónica, así como la congestión de la red en horas pico. Estas condiciones provocan caídas de velocidad, interrupciones frecuentes y una experiencia de navegación menos eficiente.
La fibra óptica, en contraste, mantiene un nivel de servicio más estable. Su tecnología permite garantizar velocidades constantes y una mayor capacidad para soportar varios dispositivos conectados de manera simultánea. Esto la convierte en una opción idónea para actividades que demandan gran ancho de banda, como el consumo de contenidos en streaming en alta definición, las videollamadas de trabajo o estudio, y la descarga de archivos pesados, sin afectar la calidad de la conexión.
Internet ADSL vs. fibra óptica: ¿cuál es la mejor opción?
La decisión entre contratar ADSL o fibra óptica está directamente relacionada con las necesidades de cada usuario y la cobertura disponible en el lugar de residencia. De acuerdo con Movistar, el ADSL puede ser suficiente para quienes requieren una conexión básica destinada a navegar por internet, consultar redes sociales o enviar correos electrónicos. Este tipo de servicio aún resulta útil en zonas donde la fibra óptica no ha llegado, ya que aprovecha la infraestructura de las líneas telefónicas tradicionales.
Sin embargo, cuando se trata de actividades que demandan un alto rendimiento, como el teletrabajo, las videollamadas constantes, el consumo de contenidos en streaming en alta definición o los videojuegos en línea, la fibra óptica representa la alternativa más adecuada. Su capacidad para ofrecer altas velocidades y estabilidad de conexión la convierte en la opción preferida frente a las limitaciones técnicas del ADSL.
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