En entrevista con Bibo, Sonia Tato, Jefe Adjunta de Cooperación de la Unión Europea y Tobías Biermman, Agregado de Cooperación para Ambiente, Clima y Empleo de la UE, hablaron sobre la importancia de tener a Colombia como un aliado para lograr mitigar el cambio climático: un objetivo mundial. También nos contaron cómo avanzan algunos de los proyectos puestos en marcha y por qué esta cooperación entre la UE y Colombia ha puesto la mirada, durante los últimos años, sobre el desarrollo rural y sostenible en el país.
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La Unión Europea será invitado de honor en la Feria Internacional del Medio Ambiente que se celebrará a partir de mañana, 29 de septiembre hasta el 2 de octubre en CORFERIAS. A propósito de esta invitación, dos miembros de la UE contaron en exclusiva con Bibo sobre la cooperación que existe desde hace más de dos décadas entre la UE y Colombia.
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Una alianza que no solo involucra al Gobierno Nacional y al sector privado para alcanzar una transformación verde en temas como el uso sostenible de la biodiversidad terrestre y marina, la lucha contra la deforestación, cambio climático y economía circular, sino que también ha demostrado ser una alianza interesada en que esta transformación verde además sea justa e inclusiva y favorezca a las comunidades más vulnerables del país.
¿Por qué Colombia como aliado de la UE para cooperar a favor del medio ambiente?
ST: Los caminos de la Unión Europea y Colombia frente a la crisis climática, de biodiversidad y de reactivación económica se encuentran ligados, ya que ambos nos hemos comprometido en reducir las emisiones y a seguir impulsando el desarrollo rural y local sostenible. Sin duda la UE cree en Colombia, identificando su potencial y avances en esta materia, y en este sentido, Colombia es un gran aliado.
Esta cooperación tiene tres ejes fundamentales: cambio climático, biodiversidad y economía circular. Háblenos un poco sobre esta última y qué se espera lograr con ella.
TB: Uno de los principales elementos del Pacto Verde Europeo es el nuevo Plan de acción para la economía circular, que es el nuevo programa de Europa en favor del crecimiento sostenible. En Colombia, trabajamos por ejemplo ahora con cuatro proyectos innovadores que implementan elementos de la economía circular, que son Producción y Comercio Sostenible con la Camera de Comercio de Bogotá, Circular Plastics in the Americas Program (CPAP), Low Carbón Business Action (LCBA), y por último Impulsando consumo sostenible en América Latina. Todos estos proyectos se presentan también en FIMA.
La UE apoya la “Agenda intersectorial” firmada entre MinAmbiente y MinAgricultura a través del programa de Asistencia Técnica, el cual busca promover el fortalecimiento de políticas públicas sectoriales. ¿Por qué es importante que exista una articulación entre estos dos ministerios para alcanzar metas climáticas?
ST: Los dos sectores agricultura y medioambiente están íntimamente ligados. Nuestras acciones de cooperación se enfocan por tanto en desarrollar sinergias y complementariedades entre los sectores ambientales y agropecuarios que permitan promover la bioeconomía, los negocios verdes, etc., para la toma de decisiones que contribuya al desarrollo agroambiental y económico de los territorios, incentivos a la conservación y la revisión de marcos normativos para la preservación y regulación de actividades productoras en zonas de interés ambiental.
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Precisamente, iniciativas como De la granja a mesa, que forman parte de la estrategia Pacto Verde de la UE, se alinean con propuestas colombianas como “Producir Conservando y Conservar Produciendo”, en la que ambos ministerios están conectados. ¿De qué forma la UE apoya esta propuesta?
TB: En Colombia, aplicaremos el Pacto Verde en todas nuestras políticas, diplomacia, comercio y cooperación, para ir de la mano con Colombia hacia la neutralidad climática. Esperamos que muchos elementos del Pacto Verde y de la estrategia «de la granja a la mesa», como sistemas de producción alimentaria más eficientes, ofrezcan buenas oportunidades para mejorar y transformar el sector agropecuario y crear valor añadido en la cadena alimentaria e incrementar las exportaciones. Además, los alimentos deben seguir siendo seguros, nutritivos y de alta calidad y deben producirse con un impacto mínimo sobre la naturaleza.
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La Unión Europea apoya el “Green Recovery” o Recuperación verde en el marco de toda la crisis sanitaria del COVID-19. ¿cómo lograr que esta recuperación sea verde pero también justa e inclusiva en un país como Colombia?
ST: La recuperación verde debe permitir que las empresas logren todo su potencial, asegurando que la transición a modelos de negocio más ecológicos no sean una amenaza sino una verdadera oportunidad. En este contexto, estoy firmemente convencida de que esta transición debe ser justa. Garantizar el dialogo permanente con los diversos sectores y actores; desde el gobierno, al sector privado incluyendo la sociedad civil, y mantener una clara participación con enfoque de género, jóvenes y mujeres, sin duda también hace parte de esta ruta de recuperación verde, justa e inclusiva para Colombia.
Uno de los programas de la UE en Colombia es la incorporación del “Desarrollo Local Sostenible en zonas Marginadas de Colombia” ligado al Acuerdo de Paz. ¿Qué se espera de este programa?
ST: El objetivo general de este programa es el de “Contribuir a la superación de las desventajas sociales y económicas de las regiones marginadas y afectadas por el conflicto de Colombia, como un medio para alcanzar un país equitativo y una paz duradera”. El programa DLS promueve el desarrollo local sostenible en áreas ambientalmente sensibles que buscan la combinación correcta de la conservación del capital natural y su uso sostenible; aumentando el empleo y los ingresos en territorios ambientalmente vulnerables.