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Las madres de los niños víctimas de abuso sexual en un jardín infantil de lCBF realizaron una nueva denuncia en contra de las directivas de la entidad por un presunto intento de comprar su silencio.
No es la primera vez que Margie Espinal, líder de las madres de los menores violentados, dice ser víctima de intimidaciones en medio del proceso investigativo por abuso sexual a menores que adelantan las autoridades y por el cual Freddy Castellanos, quien trabaja en el jardín, ya fue capturado al ser el señalado de violentar sexualmente a los menores.
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En esta oportunidad, Espinal declaró ante la opinión pública que la directora de lCBF, Astrid Cáceres, habría intentado sobornarla con viajes, dinero, y hasta con un puesto en la entidad. Las dádivas, dice Espinal, se las ofrecieron a ella y a su esposo con el fin de atenuar el proceso de denuncias públicas y penales que ella y las otras madres adelantan contra el instituto por su responsabilidad en los abusos que saltaron a la luz en mayo.
A través de conversaciones de WhatsApp que Espinal envió a la revista Semana, la denunciante muestra la forma en la cual la directora se comunica con ella para brindarle su apoyo “personal” y cualquier tipo de ayuda que requiera en medio del proceso, lo cual Espinel y las madres de los menores abusados interpretaron como un intento de silenciarlas.
“Tú ahorita estás mal, tú necesitas darte un respiro. La presión social que estás manejando por tu hija y con los medios, por ser la vocera, es algo que tú no buscaste y no sabes cómo hacerlo. Necesitas un respiro. ¿Por qué no te vas de viaje?”, relató Espinal sobre una de las conversaciones que ella y su esposo habrían sostenido con Astrid Cáceres.
Dichos ofrecimientos, acotó Espinel, no fueron ofrecidos a otras madres de los niños abusados en el jardín, por lo que la madre denunciante sostuvo que se trata de una estrategia no solo para bajar la marea del todo proceso, sino para evadir la presunta responsabilidad que tuvo la entidad en medio de los abusos.
¿Qué dijo el ICBF?
Tras saltar a la palestra pública estas acusaciones, el ICBF emitió un comunicado en el cual negó cualquier tipo de ofrecimiento o diálogo que se haya realizado al margen de los conductos regulares de la entidad, o de la investigación en curso.
“El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) aclara, con total transparencia, que en ningún momento se han realizado ofrecimientos ilegales, indebidos o que puedan interpretarse como una práctica irregular. Los apoyos del ICBF siempre se brindan dentro del marco de la ley, con reglas claras y verificables”, reza el comunicado.
Y agrega que “cualquier interpretación errónea que se realice sobre dichas actuaciones desconoce el carácter técnico y legal que rige a la institución”.
Incluso, la entidad aprovechó la misiva pública para defender su gestión en medio del escabroso caso de abuso sistemático que se presentó en el jardín de su jurisdicción. “De conformidad con el artículo 44 de la Constitución Política y la Ley 1098 de 2006 (Código de la Infancia y la Adolescencia), el ICBF ha adoptado las medidas administrativas y judiciales necesarias frente a los hechos denunciados en su momento por las familias, con el propósito de establecer responsabilidades y sancionar a quienes corresponda, siempre bajo el estricto cumplimiento de las decisiones de los tribunales”.
Finalmente, el Instituto reafirmó que continuará brindando los acompañamientos necesarios, dentro de sus competencias legales, para garantizar el bienestar de la niñez y la adolescencia de Colombia. “Nuestro actuar se rige por la ley, la transparencia y el compromiso con la protección integral de quienes más lo necesitan”, apostilló la entidad.
El caso de abuso que estremeció a Bogotá
El lunes 5 de mayo la ciudad se enteró, gracias a las denuncias de familiares de varios menores, que en un jardín bajo la jurisdicción de lCBF habían sido abusados sexualmente al menos diez niños por cuenta de un trabajador del recinto. Los hechos ocurrieron en el Jardín Infantil Parques de Canadá, ubicado en la localidad de San Cristóbal, en donde decenas de personas denunciaron los casos y señalaron los vacíos en los protocolos de respuesta del hogar infantil.
Con carteles en mano, madres de familia señalaron como responsable a Freddy Castellanos, quien, dicen, estaba a cargo de un grupo de 21 niños y niñas entre los 2 y 3 años. Esta persona hoy se encuentra detenida y afrontando un proceso por abuso sexual a menores de edad, pese a negar los cargos en su contra durante la audiencia de imputación de cargos que se efectuó al momento de su capturada.
Durante las protestas en las inmediaciones de jardín, varias madres de los menores realizaron plantones y dieron declaraciones a los medios de comunicación sobre todas las presuntas negligencias que derivaron en el abuso.
“Hace una semana nos enteramos de que este funcionario ha venido abusando de los niños dentro de la misma institución. Pero nadie nos da respuesta. Hay menores que están en hospitales”, contó una madre de familia que tiene a su hijo matriculado en dicha institución.
Información relacionada: Los testimonios de las madres que descubrieron presuntos abusos en jardín del ICBF.
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