Para un grupo de vecinos residentes en el conjunto residencial Heliconias, en el municipio de Facatativá, la paciencia por los comportamientos de uno de los propietarios, se colmó. La situación con el sujeto llegó a tal punto que la comunidad organizó un plantón para sentar su voz de protesta por los continuos comportamientos agresivos del exmilitar señalado de agredir a residentes y trabajadores del conjunto sin razones aparentes, entre otros comportamientos que impedían la tranquila cotidianidad del vecindario.
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La jornada de protesta empezó pacíficamente. Decenas de vecinos salieron a las calles aledañas al conjunto con la intención de bloquear la movilidad y llamar la atención de las autoridades sobre el dolor de cabeza que se volvió convivir con el sujeto. Sin embargo, pasaron las horas y al ver que ninguna autoridad hizo presencia, el plantón se movió para el conjunto residencial.
La situación pasó de castaño a oscuro luego de que varias personas decidieran recurrir a las vías de hecho y la emprendieran con piedras y palos contra los carros del agresivo vecino que estaban parqueados en la zona común del conjunto. La situación llegó a su punto más complejo cuando varias personas amenazaron con ingresar al apartamento del sujeto para echarlo con sus propias manos.
Ante la complejidad de la situación, las autoridades llegaron para evitar que la situación escalara. Incluso hubo un cruce de palabras entre el exmilitar señalado y la comunidad que terminó con la salida del conjunto del hombre y su familia escoltados por la fuerza disponible hasta una tanqueta de la policía que los sacó del conjunto ante la inminente amenaza de linchamiento.
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¿Qué dice la comunidad?
Un vecino del sujeto le contó a Noticias Caracol cuál fue el detonante de la situación: “Por el simple hecho de que no le cambiaron un bombillo, amenazó de muerte a una celadora del conjunto y esa fue la gota que rebosó el vaso. ¿Por qué? Porque no hay empresa de seguridad que quiera prestarnos el servicio”, contó el vecino en medio de la indignación.
El agobio que este personaje causa en su vecindario es tal, que varios de los residentes del conjunto Heliconias le contaron al noticiero que están dispuestos a dar una cuota para pagar los 91 millones de pesos que vale el apartamento con tal de que el exmilitar se vaya.
De acuerdo con los vecinos, las agresiones por parte de este sujeto empezaron desde hace cinco años, cuando empezó a propiciar riñas y a amenazar al personal de servicios del conjunto si no seguían sus órdenes. También temen por sus vidas puesto que, dicen, el hombre porta armas de fuego y por sus antecedentes de violencia, es probable que pueda hacer uso de ellas.
Las autoridades del municipio confirmaron que el señalado fue trasladado a una clínica de reposo y que ya existe una orden de captura en su contra.
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