Vendedores informales y campesinos bloquearon ingreso a Corabastos

El subgerente de Corabastos, Nelson Ramírez hizo un llamado a las autoridades para que acompañe las jornadas de vigilancia.

Foto: José Vargas

Cerca de 300 personas, entre ellas vendedores informales, campesinos, coteros y camioneros, bloquearon la entrada de alimentos a Corabastos, desde la noche de este jueves, ante las afectaciones que se que les está generando la reducción al 35% de la operaciónde la central ante el brote de Covid-19 que se ha registrado en el lugar.

Las protestas iniciaron hacia las 7:30 de la noche de este jueves y se extendieron hasta las 5:00 de la madrugada del viernes, luego de que las autoridades del lugar lograran habilitar de nuevo el ingreso de vehículos, por lo que tras la reanudación de las operaciones se presenta gran congestión de vehículos en los alrededores.

Según los manifestantes, las restricciones de ingreso a los minoristas y familias que hacen compra al menudeo y a los vendedores ambulantes, además de medidas como el pico y cédula, han afectado las ventas y por consiguiente la comida quees guardada en las bodegas puede llegar a perderse.

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Por otra parte, algunos manifestantes explican que las medidas de restricción los obligan a vender sus productos a las grandes superficies como bodegas, quienes estarían pidiendo precios muy bajos al por mayor, dejando pocas ganancias a los vendedores.

La situación, esta madrugada, se agravó luego de que vigilantes de la central y manifestantes se enfrentaran con bolillos y palos ante la ausenciade la Policía, por lo que se registran varias personas heridas. Los guardias de seguridad hicieron un llamado a las autoridades para que acompañe las jornadas de vigilancia.

Hacia las 5:00 de la mañana los compradores lograron entrar a la central aplicando el Pico y Cédula. A su vez, los camiones empezaron a ingresar por la puerta número uno y desde las 6:20 a.m las bodegas abrieron sus puertas.

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Cabe recordar que muchos manifestantes son productores de municipios de Cundinamarca. El pasado 12 de mayo, Nicolás García, Gobernador de Cundinamarca, se refirió al creciente número de casos que se han reportado en la central. “Notamos con preocupación que, en muchos casos, municipios que con casos de Covid-19 en Cundinamarca, provienen de campesinos que con esfuerzo, cariño y dedicación han ido a Corabastos y hoy tenemos no solo su contagio sino el de algunos de sus familiares o personas cercanas”, indicó.

Por eso, se han habilitado círculos cortos de comercialización para que los productores de la región no tengan que entrar hasta Corabastos para vender sus productos, de la misma forma, la alcaldía de Bogotá ha reforzado las medidas dde bioseguridad en la central y sus alrededores, donde se decretó la alerta naranja.

En esta central, ubicada en el suroccidente de la capital, ingresan diariamente cerca de 35.000 personas, 12.000 vehículos y 10.000 toneladas de alimentos, que se han reducido a la mitad debido a las condiciones en la central. Con corte a 23 de mayo, el número de contagiados por Covid-19 superaba los 40 casos.

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Las medidas de seguridad

Todos deben usar tapabocas y llevarlo de manera apropiada.

El ingreso quedará prohibido para los minoristas y familias que hacen compra al menudeo.

Los vehículos solo podrán entrar con un conductor y un ayudante.

Los vehículos deben pasar por un punto de desinfección, que cumpla con los protocolos exigidos por el Gobierno Nacional.

Se prohíbe el ingreso a la central de las personas con enfermedades crónicas (cardiopatías, hipertensión, diabetes o cáncer).

Toda persona que ingrese debe hacer higienización de manos y toma de temperatura.

Incrementar la frecuencia de lavado de manos y de aseo en las bodegas y zonas comunes. Se hará lavado de los locales ya no una sino tres veces por semana.

Se debe garantizar la prestación gratuita de los servicios sanitarios.

Reducir el aforo y el ingreso a un 35%. Lo que se busca es que al igual que ocurrió con Transmilenio, se impida que este sea un foco de contagio.

No se permitirá ninguna venta ambulante.

Se debe establecer un centro de salud dentro de las instalaciones, donde se haga la atención y tamizaje de los pacientes asintomáticos, ya que se debe tener especial atención en los coteros y zorreros.

Garantizar el distanciamiento de mínimo un metro. Habrá una ruta de circulación para evitar la aglomeración.

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