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“Cualquier colombiano o colombiana, en cualquier calle o vereda, condena hoy al ELN, lo iguala al paramilitarismo, cosa que la absurda obstinación de sus dirigentes se niega a ver”. “La enrevesada sapiencia de su dirección no ha acertado en ninguna de sus posturas políticas. Menos en su accionar militar, reducido a acciones terroristas aisladas que dan más bien pesar”. “Despierten, por las buenas nadie los sigue”.
Estas son tres de las frases que contiene la carta enviada por Rodrigo Londoño, el último jefe de la guerrilla de las FARC, a Antonio García, primer comandante de la guerrilla del ELN, grupo que desde hace una semana tiene azotada a la región del Catatumbo, Norte de Santander, con una ola de violencia que deja como saldo al menos 80 personas muertas y más de 42.000 desplazados.
La misiva de Londoño, antes conocido como ‘Timochenko’, surge como respuesta a una columna que García publicó en X (antes Twitter).
La crítica a la alianza entre disidencias de FARC y ELN que se rompió y originó una guerra
Entre los temas que el hoy jefe del partido político Comunes aborda está la relación entre el ELN y las disidencias de las FARC.
Vale recordar que el Frente 33 (perteneciente al Bloque Gentil Duarte de la disidencia Estado Mayor de Bloques y Frente, EMBF), bajo órdenes de ‘Jhon Mechas’, sostuvo una alianza con la guerrilla del ELN durante los últimos años.
Según algunas versiones, el incumplimiento de acuerdos en relación con el narcotráfico por parte del disidente ‘Richard’, otro mando del Frente 33, sería una de las causas de la ruptura de esa tregua y el inicio de la guerra entre ambos grupos.
Londoño, en su carta, critica tanto al ELN como a los disidentes: “Llama la atención que (Antonio García) pretenda escandalizar con su conclusión final de que el gobierno Petro se ha concertado con las disidencias para combatir al ELN. Al comienzo confesó que su organización se alió con ‘John Mechas’ y otros antiguos milicianos ex-FARC y que les dio todo su apoyo para armarse y crecer. En esa lógica, es malo que un grupo criminal se alíe con un tercero para combatirlos a ellos, pero no es malo que lo hagan ellos, sabedores de que su propósito era asesinar a los firmantes de paz”.
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“Ideales degradados” y desprestigio al Gobierno Petro
En otro apartado de su carta, Rodrigo Londoño hace una crítica vehemente al actuar del ELN y sus efectos en la arena política del país.
Según sostiene, esta guerrilla redujo su accionar militar “acciones terroristas aisladas que dan más bien pesar”, y la falta de estrategia en la Dirección Nacional ha fracasado en todas sus posturas políticas.
Esto, dice Londoño, “condena hoy al ELN, lo iguala al paramilitarismo, cosa que la absurda obstinación de sus dirigentes se niega a ver”.
Aunque el jefe del Partido Comunes critica en varios puntos las decisiones del Gobierno Petro, especialmente por la baja implementación del Acuerdo de Paz de 2016, asegura que mantiene su apoyo al proyecto político del jefe de Estado, mientras que el ELN, afirma, ha ayudado a “desprestigiarlo”.
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“No sólo han hecho ruina de la política de paz, equivocada o no, del actual gobierno. Han contribuido a desprestigiar el proyecto transformador, le han abierto las puertas a la ultraderecha”, sostiene Londoño en la carta.
Y finaliza con un llamado a la dirección de la guerrilla: “Despierten, por las buenas nadie los sigue. Nosotros, sin arrogancias, hemos luchado ocho años por el cumplimiento de Acuerdo de Paz, y lo seguiremos haciendo. No nos acabó la ultraderecha, menos el ELN”.