El escándalo por el millonario contrato que firmó la Empresa de Servicios Públicos de Cali (Emcali) con la Unión Temporal AMI, en el que se evidenciarían sobre costos en televisores a $42 millones y pantallas a $700 millones, terminó con la renuncia del gerente de la entidad y una oleada de reacciones en la ciudad.
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Una de estas es la del alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, quien tras recibir la renuncia de Juan Diego Florez, resaltó su trabajo durante la pandemia y el Paro nacional de 2021. “Ahora debemos revisar todo lo denunciado con relación a adquisiciones, lo que significa una reingeniería total del personal a cargo Juan Diego. Gracias. Sabes muy bien que conozco más sus aciertos que tropiezos”.
Ahora debemos revisar todo lo denunciado en relación a adquisiciones lo que significa una reingeniería total del personal a cargo
— Jorge Ivan Ospina (@JorgeIvanOspina) September 21, 2022
Juan Diego. Gracias
Sabes muy bien que conozco más sus aciertos que tropiezos
He decidido encargar al Ingeniero Humberto Serna como Gte pic.twitter.com/57Ve9w3GEH
Horas antes, el mandatario indicó que se revisarían las denuncias hechas por el sindicato, que incluye presuntas irregularidades en otros contratos y cuestionamientos al proceso que se realizó para la planta solar Mulalo y que se declaró desierto luego de repetidas denuncias de que estaría beneficiando a uno de los oferentes.
“Definitivamente comprendo la indignación y demando cuentas claras e inmediatas a todo el personal de compras de la empresa”, manifestó Jorge Iván Ospina, quien dejó como nuevo director encargado a Humberto Serna, quien era el gerente del Acueducto.
Este nombramiento tampoco cayó muy bien. Concejales como Terry Hurtado (Alianza Verde) indican que “el mensaje que envía el alcalde poniendo como gerente encargado a uno de los gerentes de la empresa me parece un mensaje bastante inadecuado, necesitamos que se dé un cambio de fondo. Una de las cosas que le veníamos reclamando al señor Flórez es que siempre buscaba una excusa para no asistir al Concejo”, dijo a La W Hurtado.
Por su parte, la cabildante Ana Leidy Erazo (Polo) señaló en el debate que se realiza en la mañana de este 22 de septiembre en el Concejo de la ciudad, que no solo se debe cuestionar a Florez, sino a la junta directiva y a los otros gerentes, por los diferentes escándalos que se han dado como el de los documentos falsos de Emilio Tapia o los contratos con Klarzen.
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“Aquí alguien tiene que responder y no es como salió el alcalde a defender a Juan Diego diciendo que él lo hizo muy bien, cuando sabemos que no lo hizo bien. Y el contralor también tendrá que dar la cara de lo que está pasando. Lo que vimos ayer es que, sin duda alguna, el control ciudadano sí sirve”, argumentó Erazo.
Por su parte, el concejal Roberto Ortiz resaltó que el alcalde Ospina no se puede lavar las manos. “Se lo veníamos alertando. Diferentes concejales han venido denunciando lo que pasa en Emcali y se hacían los de los odios sordos, de que no pasaba nada. Ya saben quienes son los señores de gris: Juan Carlos Abadía y el señor Mauricio Ospina. Ustedes escucharon cuando denuncié que frente a Chipichape tenían que ir los secretarios y gerentes de entidades para que estos dos personajes siniestros aprobaran las cosas”.
Sumado a esto, Ortiz señaló que si bien se conoce a quién beneficiaban los contratos es necesario identificar quiénes los estructuraban.
Juan Martín Bravo (Conservador) señaló que aquí se requiere que la justicia actué, dado que hace pocos meses la Contraloría General hizo hallazgos por $17.000 millones. “¿Qué pasó con esa situación? Ahora nuevamente anunciaron un control excepcional al tema de Emcali y es donde digo que van a terminar en posibles hallazgos, pero eso va a quedar en unos simples informes, porque de nada va a servir hasta que no haya respuesta penal para los corruptos”.
Por la misma línea, el concejal Roberto Rodríguez (Centro Democrático) criticó el silencio de los entes de control de lo que ha ocurrido. “Han cerrado los procesos con Emcali sin temblarles un solo dedo, tanto Procuraduría como Contraloría, entonces no les creo, ni a la Fiscalía. Más parece un show mediático, lo que si debería preocuparnos es el fondo que hoy tenemos: las empresas municipales de Cali atraviesan un momento muy difícil, porque el componente de telecomunicaciones la está condenando a generar déficit”.