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No gravar cada barril que se va a exportar y remplazarlo por una sobretasa del 10% inicial fue acogido por la industria petrolera, especialmente por Ecopetrol, sin embargo, advierte que ese sobreprecio inicial es muy alto. Los petroleros consideraban excesivo imponer un impuesto a las ventas externas. Solo la petrolera colombiana estimaba un impacto en sus finanzas de entre $4 y $5 billones. “Es un impacto importante”, reiteró el presidente de Ecopetrol, Felipe Bayón, en el congreso de Naturgas que analiza la suerte del gas natural en el proceso de la transición energética.
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Destacó que en la ponencia tributaria que ha comenzado a ser debatida en las Comisiones Económicas del Congreso se haya cambiado el impuesto a las exportaciones por una sobretasa que en principio es del 10%, para bajar al 7,5% en 2024 y llegar a 5% un año después.
“Ese concepto nos gusta. Nos gusta no gravar cada barril que se va a exportar”, reiteró el presidente de la principal empresa colombiana del sector de los hidrocarburos.
Bayón recordó que la semana pasada se dio apertura a la oficina de representación de Ecopetrol en Singapur, que se concretó a través de la filial Ecopetrol Trading Asia, los petroleros de China y de la India manifestaron la importancia del crudo colombiano para la seguridad energética de estos dos países.
Estimó que el 10% de la sobretasa que comienza a ser aplicada desde 2023, de ser aprobada la reforma fiscal en el Congreso, es muy alta. Consideró que esa sobretasa podría mejor estar ligada a la variación de precios en el mercado internacional del crudo.
A Bayón también le preocupa el no poder deducir las regalías. El Gobierno argumenta que la sobretasa es procedente “teniendo en cuenta que desde mayo de 2022 los precios de los contratos de ambos mercados (regulado y no regulado) presentaron crecimientos anuales de 11,6% y 19,7%, variaciones en precios de energía más elevadas desde 2009; y, que durante 2022 han existido condiciones hidrológicas optimas que han permitido reducir los costos de generación eléctrica, ambas condiciones mejoran los márgenes del componente de generación eléctrica, por lo que se espera que tengan una mayor capacidad de pago impositivo en el año en curso y los años venideros de estos contribuyentes”.
El presidente de Ecopetrol sostuvo que ese tema “supercomplicado”. Contempla temas de precedentes jurídicos, así “lo hemos expresado y ese va a tener un impacto bien importante”.
El otro tema incluido en la reforma tributaria de Petro es la carga tributaria para las zonas francas. Explicó que la refinería de Cartagena (Reficar) es la mayor zona franca del país y su función principal está destinada a importar los combustibles que requiera comprar el país en el mercado internacional.
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“Si Ecopetrol tuviera que exportar de la refinería para cumplir con las condiciones de la zona franca tendría que importar los combustibles al precio (internacional). O las zonas francas para gas porque van a permitir que ese potencial se desarrolle”, explicó Felipe Bayón.
El presidente de Ecopetrol pidió balancear los tributos con los buenos precios con la posibilidad de seguir con la actividad exploratoria y productiva. “Piense en término de la inversión o de la actividad. Si yo tengo que bajar la inversión, nos pasó en 2015 y 2016 en la crisis y también en la pandemia. Tuvimos que pisar el freno y cuando pisamos ese freno cae la producción, los impuestos y las regalías”.
Reiteró que la preocupación es el impacto que pueda tener en la actividad, sobre todo en términos de poder darle al gobierno como principal accionista transferencias que en un año cualquiera puede ser de entre $25 y $30 billones”.