En la noche de este martes 17 de junio, la plenaria del Senado, donde se realizó el cuarto y último debate de la reforma laboral, aprobó en medio de una acalorada discusión los artículos 23 y 25, que propone que los aprendices del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) cuenten con un contrato laboral.
(Lea: Reforma laboral: así cambiaría el día a día de los trabajadores en Colombia)
La noticia fue celebrada por Jorge Londoño, director general del SENA, quien no ocultó su entusiasmo por la aprobación. “Esto ha sido el triunfo de los y las aprendices que se movilizaron sin pausa y reposo a lo largo del país (...) Los jóvenes de esta institución podrán tener un trabajo mucho más digno”, agregó.
Tras el debate, varios congresistas también destacaron la aprobación. Andrés Cancimance, del Pacto Histórico, por ejemplo, señaló que “se dignifica el trabajo de los aprendices garantizando sus derechos laborales con todas las prestaciones sociales”. Wilson Arias, del Pacto Histórico, por su parte, aseguró que “acabaron de aprobar los derechos laborales para 400.000 jóvenes aprendices del SENA”.
Desde SindeSENA, el sindicato de la entidad, de igual modo, recibieron con buenos ojos la noticia. Augusto García, vocero del sindicato, expresó que lo aprobado fue lo que se había propuesto desde la organización sindical y desde la entidad.
Sin embargo, la noticia no fue bien recibida en todos los sectores. Para Ciro Ramírez, del Centro Democrático, “el mayor avance que tuvieron los aprendices del SENA fue en 2002. Desafortunadamente, lo que se ha votado hoy en el Senado será reconocido en la historia como la muerte de los contratos de aprendizaje”. Carlos Meisel, del Centro Democrático, rechazó ambos artículos, argumentando que los textos aprobados en la Cámara eran “más benéficos para los estudiantes y para la pequeña empresa”.
(Puede leer: El Icetex no está desfinanciado, según el presidente de la entidad)
María Fernanda Cabal, senadora del mismo partido, también expresó su rechazo. Durante su intervención, afirmó que, mientras las “barras bravas del petrismo” celebraban, no eran conscientes de que con lo aprobado “van a traer ruina para los estudiantes que necesitan al SENA como un medio de superación de la pobreza, pero también para una sociedad que necesita más técnicos”.
¿Qué se aprobó en la reforma laboral para los contratos de aprendices SENA?
Antes de entrar en detalles sobre los cambios introducidos por esta reforma laboral, es importante entender que el proceso formativo de los aprendices SENA, como explicamos en esta nota, está dividido en dos etapas. La primera es la fase lectiva, que corresponde al período de enseñanza técnica en los centros de formación. Esta fase teórica dura aproximadamente dos años y medio. Durante este tiempo, los aprendices reciben un auxilio mensual equivalente al 50 % de un salario mínimo y cuentan con afiliación a una EPS.
La segunda es la productiva, que consiste en las prácticas laborales y tienen una duración aproximadamente de seis meses. En esta fase, los aprendices reciben un auxilio del 75 % de un salario mínimo mensual vigente y tienen afiliación a una EPS y a una ARL.
Por ley, las empresas privadas con más de 15 trabajadores deben vincular a un aprendiz por cada 20 empleados. Además, por cada grupo adicional entre 10 y 20 empleados, deben contratar a un aprendiz más. Por ejemplo, una empresa con 52 empleados debe contratar dos aprendices por los primeros 40 trabajadores y uno adicional por los 12 restantes.
(Lea también: Dos escuelas colombianas son finalistas de un premio internacional de educación)
En caso de no cumplir con esta obligación, las empresas deben pagar una monetización al SENA equivalente a un salario mínimo mensual por cada contrato de aprendiz no suscrito. El problema, según García, de SindeSENA, es que bajo la ley actual “se le quitó el carácter de salario al contrato de aprendizaje y se convirtió en un auxilio”.
Con el objetivo de devolver el carácter laboral a estos contratos, el artículo 23 de la reforma (ya aprobado) establece que los contratos de los aprendices sean laborales, con todas las prestaciones legales (salud, pensión y ARL). Además, propone aumentar la remuneración: del 50 % al 75 % en la etapa lectiva, y del 75 % al 100 % durante la etapa productiva. También se reconocerá la experiencia como laboral y certificada.
El artículo 25, por su parte, modifica la monetización de la cuota de aprendizaje. A partir de la aprobación, las empresas que no cumplan con la obligación de vincular aprendices deberán pagar una multa de 1,5 salarios mínimos por cada aprendiz no contratado. “En caso de que la monetización sea parcial, esta será proporcional al número de aprendices que dejen de hacer la práctica para cumplir la cuota mínima obligatoria”, precisó el documento.
¿Son positivos o negativos estos cambios?
Estos ajustes deben analizarse con cuidado, advirtió Iván Jiménez, profesor del Observatorio Laboral de la Universidad Javeriana. Explicó que el costo del contrato pasará de 0,75 a 1,9 salarios mínimos. “La pregunta es cómo harán las pequeñas y medianas empresas para contratar un aprendiz adicional”, planteó.
“Si tengo 15 empleados y por ley debo contratar a uno más, pero no tengo funciones ni presupuesto para asignarle, ¿qué hago? Contratarlo implica costos de transacción. Con este ajuste, muchas empresas considerarán más rentable pagar la multa”, añadió.
Luis Orozco, profesor de la Facultad de Administración de Empresas de la Universidad Externado, coincidió en que esto puede frenar el crecimiento de las pequeñas y medianas empresas, porque “estamos hablando de un flujo de caja adicional de entre ocho y diez millones de pesos. Eso es difícil para empresarios que ya están sobregirados y endeudados”.
Otro riesgo, en opinión de Jiménez, es que algunos estudiantes abandonen su formación en el SENA y no se gradúen, lo que podría obligarlos a ejercer sin título en el mercado laboral formal, con salarios más bajos.
Jiménez, no obstante, hizo un llamado a no caer en el pesimismo. Sugirió que si las empresas deciden pagar la multa, el SENA podría fortalecer sus programas con esos recursos. Y si deciden vincular a los aprendices, se genera una oportunidad valiosa para la formación técnica. “¿Te imaginas tener al mejor técnico trabajando junto al mejor profesional? Uno aporta la teoría, el otro la práctica. Así podrían diseñar los mejores carros de Fórmula 1 de Mercedes-Benz”, concluyó.
(Puede leer: Prima para maestros: de cuánto es, cuándo pagan y quiénes no la reciben)
👩🏫📄 ¿Quieres conocer las últimas noticias sobre educación? Te invitamos a verlas en El Espectador. ✏📚
