Binomio de Oro, un vallenato sin tiempo

El Binomio de Oro está conformado por Israel David (vocalista), Samir Vence en el acordeón e Israel Romero como el líder de la agrupación. / Archivo particular

El Binomio de Oro sigue vigente, tras su conformación en 1976. Ahora regresará a las tarimas, aunque nunca haya estado alejado. Pero no cualquier escenario. Como un fenómeno exótico, por primera vez se cruzará en tarima con Martin Garrix y Fatboy Slim, representantes de la música electrónica en el mundo. Aunque muy poco se relacione su propuesta, lo cierto es que la agrupación vallenata será parte del segundo día del Festival Estéreo Picnic en Bogotá. El colectivo folclórico no trae beats de sonidos digitales o punk, lo cierto es que llega como embajador nacional del folclor y la idiosincrasia vallenata. Con una lírica que le canta al amor, el desamor y otros tantos temas que han hecho del Binomio una agrupación de oro.

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Desde el viernes 25 hasta el domingo 27 de marzo, las personas que lleguen al campo de golf Briceño 18 vivirán una fiesta inolvidable a lo largo de tres escenarios y casi cuatro horas de baile, al ritmo de acordeón, tocado por el reconocido Israel Romero, el mismo fundador del grupo. Su talento empírico le ha permitido mantener a flote la agrupación y ahora demostrar las razones por las que el grupo ha ganado un selecto puesto dentro de uno de los festivales de música más importantes de Colombia y uno de los más relevantes en la escena suramericana.

“Queremos vivir esta gran oportunidad. Creo que las palabras no alcanzan para expresar todo el agradecimiento que tenemos y las expectativas con las que estamos. Nosotros vamos en nombre del folclor, de la cultura vallenata, pero más allá de eso a mostrar nuestra idiosincrasia. Hay otros artistas, como J Balvin, que representan a Colombia, pero su género no nació propiamente en el país. Para nosotros es valioso alternar con figuras tan fundamentales de la música en este momento”, le dijo Israel Romero a El Espectador.

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Desde hace cerca de tres meses el grupo comenzó la jornada de ensayos para hacer una representación digna de cumplir con todas las expectativas del público. Para el Binomio, el hecho de haber sido escogidos representa un nivel de compromiso extra. Saben que esto merece todo su trabajo y entrega. La idea es dejar en alto el vallenato, y para ello no pueden ser inferiores en responsabilidad. Con el paso de los días, el nivel de ansias y expectativas aumenta. Con un recorrido por toda la historia del Binomio, desde sus inicios con Rafael Orozco hasta la actual voz de Israel David, la agrupación le hace homenaje a la música vallenata.

“Tenemos que demostrar porqué llevamos tantos años de figurar en esta carrera, ya son cuatro décadas. Tenemos ahí para la historia el haber recibido algunos de los galardones más inolvidables, como Congos de Oro en Barranquilla o Premios Grammys, Premios Honda en Venezuela, Galardones en Aruba o en Curazao. Hemos tenido discos de oro. Fuimos el primer grupo en Latinoamérica en ganar un disco doble de platino. Esta invitación que tenemos al Estéreo Picnic es un homenaje a nuestra carrera”, asegura orgulloso el músico.

El Binomio de Oro y su paso por distintas generaciones

El 16 de junio de 1976 se consolidó en la mente de muchos seguidores que vieron nacer a uno de los dúos más trascendentales de la música vallenata. Israel Romero y Rafael Orozco se volvieron buenos amigos y decidieron emprender un camino musical juntos.

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Orozco interpretaba y Romero componía y tocaba el acordeón. Los sonidos de este instrumento probaron nuevos matices en los paseos y merengues vallenatos y se fusionaron los estilos de Alfredo Gutiérrez y Luis Enrique Martínez. El dúo comenzaba una etapa de gloria para ellos y el género.

Comenzó a desarrollarse “La Binomiomanía”, crearon canciones que hoy día son himnos como Dime pajarito o Bonito amor. Comenzaron con Venezuela, el Caribe, Panamá y Ecuador, y luego estos países se volvieron recurrentes. Con el Binomio, el vallenato llegó al Madison Square Garden en Nueva York.

“Rafael Orozco será siempre un cantante inolvidable, porque dejó un legado musical muy importante durante su carrera artística. Demostró disciplina. Además, su voz siempre va a transmitir un sentimiento tan profundo, que ha marcado no solamente a su generación, sino a los nuevos. La gente ha sabido corresponder a todo eso que Rafael Orozco nos dejó y que a mí hoy día solo me llena de orgullo haber sido compañero de fórmula de un hombre tan talentoso”.

Incluso, varias de sus canciones llegaron a tener versiones diversas para distintos países. Sin embargo, la muerte del vocalista Rafael Orozco paralizó al Binomio durante un año. El grupo debía continuar, y para ello el Pollo Isra, como se le conoce a Israel Romero, se convertiría en su columna vertebral. A él llegaron las nuevas voces de Jean Carlos Centeno y Gaby García. Con ellos, el grupo logró el disco de platino. Gaby García se retiró y en su reemplazo llegó Jorge Celedón, quien estuvo hasta 1999. Júnior Santiago y Alejandro Palacio son otros de los artistas que han sido parte de esta agrupación.

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Su música llegó hasta la Academia Latina de la Grabación, que en 2006 los nominó a Mejor álbum de vallenato-cumbia por su producción Grafity de amor.

“Nosotros siempre hemos tenido un espíritu innovador. Hay que entender que no todo sigue igual y a veces es difícil pegar conceptualmente. Estamos ante un posmodernismo que va cambiando constantemente frente a una lírica concebida por el folclor. Por esa razón, hemos tratado de adaptarnos y al mismo tiempo nos hemos distinguido por seguir haciendo música con poesía, con letras sentidas frente a muchas canciones que hoy solamente dicen palabras vulgares. Nosotros tratamos de conservar la esencia del costumbrismo, del regionalismo, sobre todo por el respeto al público que tanto cariño nos ha brindado”.

Las giras por Estados Unidos continúan en 2022 y durante ese transcurso grabarán nuevas canciones junto a Israel David y nuevamente con Jean Carlos Centeno y Jorge Celedón. El Binomio demuestra que habrá música para rato, que seguirá a esta nueva generación, sin hacerlos olvidar las raíces del vallenato clásico. Por ahora la cita será en las tarimas del Festival Estéreo Picnic, que también se moverá a ritmo de folclor.