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Corte Suprema confirma condena contra cómplice del atentado a escuela de Policía

Ricardo Carvajal fue condenado a 46 años de cárcel por su participación en el atentado a la Escuela de Cadetes de la Policía, General Francisco de Paula Santander, que ocurrió el 17 de enero de 2019. En el hecho murieron 22 uniformados y más de 80 personas resultaron heridas.

Redacción Judicial

25 de marzo de 2024 - 03:17 p. m.
Imágenes de un plantón frente a la Fiscalía en el aniversario número tres del atentado a la escuela de cadetes General Santander.
Foto: El Espectador - Gustavo Torrijos Zuluaga
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La Corte Suprema de Justicia confirmó la condena en contra de Ricardo Carvajal, quien fue condenado por su participación en el atentado a la Escuela de Cadetes de la Policía, General Francisco de Paula Santander, ocurrido el 17 de enero de 2019.

El alto tribunal rechazó una casación que presentó su defensa en la que pedía que se revisara su sentencia a 46 años de cárcel, pues consideró que la condena tenía errores y los jueces que conocieron el caso no tuvieron en cuenta pruebas claves.

Sin embargo, para la Sala de Casación de la Corte Suprema de Justicia, el recurso no cumplió con los requisitos de ley, por lo que la rechazó y, de esta manera, confirmó la sentencia en contra de Carvajal.

Según la investigación en su contra, el condenado pagó el arrendamiento de una bodega, ubicada en el barrio Santa Librada en el sur de Bogotá, en donde los autores materiales del atentado acondicionaron la camioneta con 80 kilos explosivos que, posteriormente, ingresó a la escuela.

El atentado tuvo un saldo de 22 uniformados muertos y más de 80 personas resultaron heridas. Carvajal fue declarado responsable de los delitos de terrorismo agravado, homicidio agravado, homicidio en grado de tentativa agravado, fabricación, tráfico y porte de armas de fuego de uso privativo de las Fuerzas Armadas, y daño en bien ajeno agravado.

De acuerdo con la investigación, José Aldemar Rojas, alias El Mocho, fue el encargado de entrar la camioneta con explosivos a la Escuela de Policía General Santander. La autoría del atentado la reclamó el ELN y llevó a que el entonces presidente Iván Duque congelara las negociaciones de paz con la guerrilla. Los diálogos solo se reactivaron cuatro años después, cuando el presidente Gustavo Petro llegó a la Presidencia.

Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.

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