No ha sido una buena semana en términos judiciales para el ministro del Interior, Armando Benedetti. Al escándalo por el allanamiento a su vivienda, ordenado por la magistrada Cristina Lombana, de la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia, se suma la decisión de la Fiscalía General de la Nación de abrir una indagación preliminar relacionada con el leasing de su casa, en el Club Lagos de Caujaral, en Puerto Colombia (Atlántico).
El ente investigador busca establecer de forma previa si hubo irregularidades en el negocio por medio del cual el ministro de gobierno y alfil del presidente Gustavo Petro, cuyos ingresos oficiales son de unos COP 27 millones mensuales, pudo hacerse a esa mansión en uno de los condominios más lujosos y exclusivos del departamento del Atlántico. Pese a que en años anteriores dijo ante la Corte Suprema que estaba “completamente en la quiebra”.
Pero las pesquisas de la Fiscalía no solo están relacionadas con el costo de la propiedad y la forma en la que el ministro Benedetti pudo hacerse a ella, sino también con la persona con la cual hizo el negocio del leasing de vivienda: Ricardo Leyva, un megacontratista del sector de eventos y espectáculos que tuvo a su cargo un millonario contrato para la realización de un concierto durante la cumbre de la CELAC, en Santa Marta, hace solo una semana.
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Según lo que se sabe hasta el momento, la mansión de Benedetti allanada el pasado martes por orden de la magistrada Lombana le pertenece realmente al Grupo Colpatria, que la arrienda mediante un leasing habitacional. Sus tres últimos inquilinos son personas bien conocidas para la opinión pública. La propiedad estuvo primero en manos de Alex Saab, señalado de ser el testaferro de Nicolás Maduro y hoy ministro de Industrias de Venezuela.
De las manos de Saab, la propiedad pasó a ser habitada por Ricardo Leyva. El megacontratista es el dueño de la empresa Ave Fénix Entretenimiento S.A.S., la misma que recibió a dedo y sin licitación un contrato de COP 7.968 millones para la realización del evento cultural “Concierto en el país de la belleza”, en el marco de la cumbre de la CELAC. Particularmente, ese contrato se cerró al tiempo que Leyva le entregaba a Benedetti su leasing en Lagos de Caujaral.
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Benedetti se pasó a la mansión del megacontratista hace unos dos meses y Leyva se fue a vivir en el antiguo apartamento del ministro del Interior, ubicado en Barranquilla. El 23 de octubre se cerró el contrato con RTVC para la producción del concierto durante la cumbre de Santa Marta, por parte de Ave Fénix Entretenimiento. Los detalles de esa movida fueron revelados por Camilo Enciso, exsecretario de Transparencia de Juan Manuel Santos.
Lo que los agentes del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) buscan establecer por medio de su indagación preliminar es la posible conexión entre la asignación del millonario contrato a la empresa de Leyva y el negocio de la mansión del Lagos de Caujaral en la que hoy viven el ministro Benedetti y su familia. De tener razones de fondo para iniciar una investigación, estaría a cargo de la unidad de fiscales delegados ante la Corte Suprema de Justicia.
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Tras conocerse la decisión de la Fiscalía, el ministro Benedetti le salió al paso a la indagación preliminar por medio de una publicación en su cuenta de X: “Bienvenida la indagación preliminar. Esto confirma que la magistrada Lombana no podía allanar mi lugar de residencia, y mucho menos hacerlo de forma violenta e ilegal. La magistrada Lombana fue recusada para investigar supuestos hechos de enriquecimiento ilícito en mi contra”.
Insistió además en que el allanamiento ordenado por la magistrada Lombana está por fuera de sus competencias. “Aún así, en Barranquilla interrogó a Leyva y otros empresarios por hechos ocurridos dos meses atrás, cuando dejé de ser senador hace ya tres años, y presionó a muchas otras personas por actividades de hace apenas un mes, amenazándolas incluso con extradiciones y con enviarlas a prisión", concluyó el ministro Benedetti.
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