Nueva captura por homicidio de siete funcionarios del CTI en el 2000

Captura de Óscar Darío Cuadrado

Foto: Fiscalía

Capturaron en Valledupar a Óscar Darío Cuadrado, un exintegrante de las extintas Auc que habría participado en el asesinato y posterior desaparición de una comisión de peritos e investigadores del CTI de la Fiscalía, en marzo del 2000. Según la investigación, Cuadrado habría hecho parte del grupo que tuvo el último contacto con los funcionarios, antes de su muerte. Al hombre, formalmente vinculado a la investigación, le imputaron los delitos de desaparición forzada, homicidio agravado y concierto para delinquir agravado.

Según el ente investigador, los siete funcionarios se habían trasladado al sector conocido como Minguillo, en la zona rural de La Paz (Cesar), realizando labores de exhumación. Según la investigación, mientras avanzaban las diligencias, “los miembros del CTI fueron interceptados por hombres del entonces frente Juan Andrés Álvarez, golpeados, sometidos y entregados a una comisión armada”. Así mismo, la entidad que, al parecer, trasladaron a las víctimas hasta el río Cesar, entre Agustín Codazzi y Valledupar, donde las habrían asesinado y desaparecido los cuerpos sin que hasta el momento se tenga información sobre su paradero.

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Por el asesinato y desaparición de los funcionarios, los exparamilitares alias el Tigre y Chitiva, fueron capturados entre el 30 de noviembre y 3 de diciembre de 2019 por el crimen de lesa humanidad que según las autoridades, fue ordenado por Carlos Castaño en el que fueron asesinados Carlos Ibarra, Israel Roca, Mario Anillo, Hugo Quintero, Edilberto Linares, Danilo Carrera y Jaime Barros Ovalle.

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En el caso, alias el Samario, antiguo miembro del frente Juan Andrés Álvarez del Bloque Norte de las Auc, declaró ante la justicia que recibió los restos de los investigadores y los arrojó al río Cesar desde el puente Rabo Largo. Asimismo, alias Tigre, señalado de secuestrar a la sobrina de Gabriel García Márquez en 2018, dijo que la orden de asesinar a los funcionarios la dio el jefe máximo de las Autodefensas Unidas de Colombia, Carlos Castaño Gil, luego de suponer que los investigadores adscritos a la Fiscalía eran colaboradores de la guerrilla.

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Adicionalmente, El Tigre dio pistas de dónde estarían los cuerpos de los siete funcionarios. Sin embargo, luego de decenas de excavaciones a orillas del río Cesar, no se ha encontrado ninguna pista. “Los enterraron cerquita del río para que la creciente se los llevara cuando lloviera”, relató el exparamilitar a la Fiscalía. También así, en su proceso de desmovilización, dio algunos nombres de quienes, según él, desaparecieron a los investigadores: Gorgojo, la Mona, Kevin, Guerrero, el Paisa, Martín y Guajiro.

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Por otra parte, Rodrigo Tovar Pupo, alias Jorge 40, jefe del Bloque Norte de las Auc (al cual estaba subordinado el Frente Juan Andrés Álvarez), también aceptó en su versión libre a fiscales de Justicia y Paz haber participado en estos crímenes por orden de Carlos Castaño Gil. En diciembre de 2012, Tovar Pupo fue condenado a 25 años de prisión por el Juzgado Especializado de Descongestión Adjunto de Valledupar, por la desaparición y el homicidio de siete miembros del cuerpo técnico.