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La Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá ordenó la libertad, por vencimiento de términos, del general en retiro Jorge Horacio Romero Pinzón, excomandante de la Cuarta Brigada del Ejército que está en juicio ante la Sala de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia por supuestos actos de corrupción. En audiencia realizada este viernes, el magistrado Alberto Poveda dijo que ya han pasado más de 240 días desde que la Fiscalía presentó el escrito de acusación en su contra (el 22 de noviembre de 2019) y no ha iniciado la audiencia de juicio oral.
La decisión conocida por este diario contabilizó los días en los que hay vacancia judicial: “(...) se configura la causal de libertad porque los 240 días que surgen de la duplicación del plazo establecido en el numeral 5° del artículo 317 de la norma procesal, por tratarse de un asunto en el que se persiguen delitos de aquellos que se denominan de corrupción, se configura objetivamente la causal de libertad. La configuración de la causal de libertad tiene como consecuencia, que se ordene a las autoridades correspondientes, entre ellas, al INPEC y a quien corresponda en el lugar de privación de libertad del procesado, la puesta en libertad inmediata e incondicional”.
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De esta forma, el general (r) Romero seguirá vinculado al juicio, pero en libertad. El pasado 10 de diciembre, otro magistrado del Tribunal había negado la libertad al uniformado indicando que solo habían pasado 210 días, plazo que no permite conceder el beneficio. Ahora, esta nueva decisión ordenó “al Inpec y a los custodios del lugar de privación del procesado, Escuela de Caballería del Ejército Nacional, Bogotá y al Juez de conocimiento, Sala de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia, informando lo resuelto en esta sede”.
Romero Pinzón fue comandante de la Séptima y de la Cuarta Brigada del Ejército Nacional, en Villavicencio y Medellín respectivamente, luego de haber sido ascendido general en 2014. En agosto de 2019, apenas semanas después de haber sido llamado a calificar servicios, fue capturado y enviado preventivamente a prisión por supuestas irregularidades en 26 contratos celebrados en la última de estas unidades militares pues, al parecer, se cobraban millonarias coimas para favorecer a terceros. Desde el 22 de noviembre de 2019 está en juicio ante la Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia que resolvió hace pocos días qué pruebas serán tenidas en cuenta en este caso.
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Romero fue acusado por los delitos de concierto para delinquir agravado, interés indebido en la celebración de contratos, cohecho propios y peculado por apropiación. Según la Fiscalía, el alto oficial, como comandante de la Cuarta Brigada habría acordado con el capitán (hoy mayor) Edwin Eduardo Carrillo Pacheco, comandante y jefe de Presupuesto del Batallón de Servicios No. 4 “Yariguíes”; así como el teniente coronel Harold Felipe Páez Roa; y la asesora jurídica Angélica María Oviedo, apropiarse de dinero del Estado en contratos ajustando las condiciones de los mismos al perfil del proponente a cambio de dinero.
“El general Romero Pinzón valiéndose de su cargo de comandante de Brigada ordenó a sus subalternos adjudicar contratos a aquellos contratistas que le generaban beneficios económicos”, indicó la Fiscalía en la acusación. De los 26 contratos mencionados, hay varios relacionados con mantenimiento de vehículos y motos de la Cuarta Brigada, así como para el suministro y catering, entre otros. Los contratos iban desde los $6, $7 y $10 millones, a $31, $40, $43, $55, $66 y hasta $104 millones, entre otros.