Los hechos que rodearon la muerte de Juliana Giraldo, han despertado una nueva ola de indignación en el país que, una vez más, recae sobre una institución estatal. El mismo Ejército confirmó, en la mañana del jueves 24 de septiembre, que la mujer murió a causa de un ataque con arma de fuego perpetrado por uno de sus militares en medio de operaciones (no especificadas) en el municipio de Miranda, Cauca. Varias versiones de lo ocurrido empezaron a circular en medios de comunicación y redes sociales, mientras la Fiscalía anunciaba la apertura de una investigación de carácter urgente.
El Espectador corfirmó que, en la noche del jueves, el fiscal nombrado para la coordinación de la investigación del caso, Mauricio Noguera, aterrizó en Cali (Valle del Cauca), desde donde se trasladará al lugar del los hechos. El funcionario le dijo a este diario que, independiente de las circunstancias en las que haya ocurrido la muerte de Juliana Giraldo, la investigación se adelantará bajo un enfoque de identidad de género, pues la víctima era una mujer trans y murió en hechos violentos.
Noguera trabajó durante siete años en organizaciones privadas para la defensa de los derechos de la población LGBTI, intervino en la implementación de políticas públicas LGBTI en Bogotá, fue becario en la unidad LGBTI de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y coordinó por cinco años el equipo contra la violencia a la población LGBTI de la Fiscalía. Aseguró que llevará el caso de manera “rigurosa y comprometida, desde el dolor que implica para la población trans la ocurrencia de un nuevo hecho violento”.
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“Este viernes nos movemos al Cauca a ver en terreno las condiciones en que se dieron los hechos, entrar en contacto con la familia, las personas que estaban en el carro y con las diferentes partes involucradas. Pero lo más importante es entrar reconociendo una hipótesis de investigación en la que media la identidad de género de la víctima, es decir, que reconoce su identidad de género, aunque no hubiera hecho el cambio de nombre en la cédula, y reconoce su contexto específico”, explicó el fiscal Noguera.
Agregó que, si bien la investigación está en una etapa temprana en la que no se tiene certeza de ninguna hipótesis, se debe determinar si, por un lado, hubo un retén y si en esa diligencia se presentó algún perfilamiento de la víctima, o si hubo algún contacto visual que pudo generar incomodidad. O si, por el contrario, como algunos testigos han narrado, los militares no identificaron a nadie y dispararon sin mediar palabra. En ese sentido, señaló que es perentorio que la investigación determine si la identidad de género de Juliana Giraldo, tuvo o no que ver con el disparo que recibió.
Noguera señaló que “es un caso delicado por obvias razones, entre ellas, los hechos de violencia que se han presentado contra las mujeres trans este año y, en el marco de esa preocupación es que se adelanta esta investigación. Ya se realizaron los actos urgentes que implican el levantamiento del cadáver, recoger los proyectiles, entre otras actividades de rigor, y tenemos algunas entrevistas que han realizado los técnicos de investigación. Pero hay que establecer con claridad y pruebas las responsabilidades penales e individuales a las que haya lugar".
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Confirmó que, al momento, un soldado se encuentra bajo vigilancia militar, tras haber sido señalado por sus compañeros. No obstante, aclaró que esto es independiente del trabajo de la Fiscalía que, según avance, puede confirmar esa responsabilidad o encontrar otras más. Admitió que, aunque el Ejército manifestó que colaborará con las autoridades judiciales en el esclarecimiento de este caso, al momento, no tiene comunicación directa con algún delegado de la institución.
El funcionario aclaró que en esta etapa no puede determinar qué delitos se le imputarán al militar que disparó, pues eso implicaría asumir una postura de antemano. “Prefiero resolverlo para cuando tengamos más avances en la investigación”, explicó Noguera, afirmando que las labores se están desplegando con toda la celeridad que el caso requiere y por orden de la vicefiscal, Martha Mancera, con el apoyo de la Seccional Cauca y de la delegada para la Seguridad Ciudadana, Carmen Torres Malaver.