“El sueño de Martin Luther King”: los seguidores demócratas de la candidata a la elección presidencial de noviembre Kamala Harris fueron en masa a aplaudirla el martes en Pensilvania durante el primer acto de campaña por la designación de su compañero de fórmula, el gobernador de Minnesota, Tim Walz.
“Dios mío”, exclamó una partidaria demócrata. Esta campaña “incluye realmente a todo el mundo”.
La vicepresidenta y su compañero de fórmula eligieron Filadelfia, la principal ciudad del estado clave de Pensilvania, para su primer encuentro conjunto, cuando apenas han transcurrido tres semanas de una campaña trepidante tras la sorpresiva retirada del actual presidente, Joe Biden.
El entusiasmo de los seguidores demócratas se ha disparado y flotan en una nube de optimismo, reforzados por unas encuestas más favorables a la candidata que las que tenía Biden, lastrado por las dudas sobre su capacidad física y mental.
Según resumió The Guardian, entre las encuestas nacionales recientes cara a cara, SurveyUSA colocó a Harris tres puntos por delante de Trump, 48 % a 45 %; Morning Consult la colocó cuatro puntos arriba, 48 % a 44 %; YouGov y CBS News le dieron una ventaja de un punto a Harris, 50 %-49 %; y la Universidad de Massachusetts Amherst puso a Harris tres arriba, 46 %-43 %.
También, hubo buenas noticias para Harris from the Hill, ya que el “centro definitivo de encuestas, predicciones y resultados electorales” del sitio mostró a la demócrata con un índice de favorabilidad positivo por primera vez, después de una fuerte subida desde mediados de julio, cuando Biden renunció.
Respecto a los números por estado, en las encuestas que concluyeron en agosto, Public Policy Polling, una firma demócrata, encontró que Harris subió un punto en Georgia, pero bajó dos puntos respecto a Trump en Arizona y bajó uno en Pensilvania. Trafalgar/Insider Advantage, una operación de tendencia derechista, puso a Trump dos en Georgia, recogió el medio inglés.
De acuerdo con los promedios del sitio de encuestas FiveThirtyEight, Trump aventajaba a Harris por dos puntos en Arizona y uno en Georgia, con Harris arriba por dos puntos en Michigan, uno en Pensilvania y uno y medio en Wisconsin.
Pero hubo buenas noticias para Harris en un estado sólidamente demócrata, Nueva York, donde según Siena College la encontró arriba por 14 puntos, 53 % a 39% .
En entrevista con The Guardian, Nate Silver, fundador de FiveThirtyEight y una voz influyente entre los analistas de encuestas, dijo que Harris “ahora tiene una ventaja real en las encuestas nacionales, alrededor de dos puntos, y también ha estado por delante en las encuestas más recientes” de Pensilvania, Michigan y Wisconsin.
Y es que el nombramiento de su compañero de fórmula, Tim Walz, no ha hecho más que disparar las expectativas.
En las pantallas gigantes del mitin en Filadelfia también se actualizaron los clips de campaña, con el rostro sonriente de Walz, antiguo profesor y entrenador de fútbol americano, un pasado al que la candidata se refirió extensamente en su discurso.
En el centro que acogía el mitin, la multitud enarbolaba pulseras azules, el color de los demócratas, mientras se preparaban para la llegada de la candidata al son de canciones de Usher, DJ Riel y Mark Ronson.
En un auditorio abarrotado de entusiastas demócratas, Harris advirtió que esta campaña “no solo es un combate contra Donald Trump”, el rival republicano, sino “es un combate por el futuro”, dijo.
Fuera del estadio, las camisetas y chapas con la efigie de Walz, nominado unas horas antes, eclipsaban los pocos pins que aún llevaban los nombres de Biden-Harris.
Pisando fuerte
Por su parte, su compañero de fórmula, Tim Walz, elegido este mismo martes, arremetió durante la reunión contra Donald Trump, al que consideró demasiado egoísta para servir a los estadounidenses, y su compañero en carrera a la Casa Blanca, J.D. Vance.
“Donald Trump ve el mundo de otra manera. No tiene ni idea de servicio porque está demasiado ocupado sirviéndose a sí mismo”, dijo Walz ante los aplausos del público.
Además, calificó de “raro” a su rival republicano, J.D. Vance, y lo retó a un debate televisado.
Tanto Walz como J.D. Vance, senador por Ohio y “número dos” del republicano Donald Trump, fueron nombrados para atraer votos de las clases trabajadoras del cinturón industrial del Medio Oeste del país, pero el demócrata quiso distanciarse de su contrincante.
“Tim va a esta listo (para gobernar) desde el día uno. Cuando lo comparas al compañero de fórmula de (Donald) Trump es como comparar al equipo titular de la universidad con el suplente”, indicó Harris en la presentación hoy de la fórmula demócrata ante unas 10.000 personas en Filadelfia.
El gobernador de Minesota dijo que creció con “gente normal en el corazón del país”, en contraste con Vance, quien estudió en la prestigiosa Universidad de Yale y “su carrera fue financiada por los multimillonarios de Sillicon Valley”, afirmó.
“No puedo esperar a debatir con este chico”, afirmó Walz, quien saca 20 años de diferencia a Vance.
Este primer mitin conjunto en Pensilvania, un estado fundamental para la victoria del próximo inquilino de la Casa Blanca, es el primero de una gira de varios días por varios estados decisivos.
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