“Mi hija no se suicidó, a ella la mataron”: madre de joven colombiana muerta en hotel de Cancún

Siguen siendo confusas las causas de la muerte de la joven colombiana Sara Ramírez Bonilla, quien fue encontrada muerta en el césped del hotel Villas del Palmar en Cancún tras supuestamente haber caído del sexto piso en estado de embriaguez, según lo informado por las autoridades mexicanas.

María Claudia Bonilla, madre de la joven, de 22 años de edad, concedió una entrevista a Noticias RCN en la que aseguró que en el caso de su hija se han presentado innumerables irregularidades como que únicamente pudiera sacar del país el cuerpo de su hija cremado, o que se haya dado un dictamen de la muerte sin ni siquiera hacerle una autopsia al cuerpo. (Lea: Confusas versiones en caso de colombiana muerta en hotel de Cancún)

“Dicen que Sara murió de una fractura craneoencefálica, pero cómo hicieron pasara saberlo si hay parámetros internacionales para hacer autopsias, y nada de eso sucedió”, cuestiona María Claudia.

De hecho va aún más allá y afirma que su hija no se suicidó como lo asegura la Fiscalía de México. “A ella la mataron, ¿cómo? eso está por averiguarse porque todo lo tienen muy organizado. A mí me hicieron firmar una serie de papeles para encubrirse entre ellos y no sé qué complicidad haya entre el hotel, la morgue y la Policía”.

Sobre las versiones encontradas entre las autoridades y el novio de su hija, quien estaba con ella de vacaciones en Cancún, se mostró extrañada porque según el relato de la pareja de su hija, él subió a la habitación a bañarse y ella prefirió quedarse en el lobby fumándose un cigarrillo. Al no encontrarla, empezó a buscarla por todo el hotel y pasó varias veces por el lugar donde fue encontrado el cuerpo.

“El cuerpo fue puesto en ese sitio”, asegura y además confirma la versión que se había conocido hace unas semanas frente a que el novio habría tenido que pagar 5.000 dólares a los oficiales para que le permitieran salir de México.

“Cuando el novio sale, lo meten en un cuarto y de ahí lo tienen todo el día y le piden 5 mil dólares para llevarlo al aeropuerto y no incriminarlo en el asesinato de mi hija”, indicó.

María Claudia lamenta cómo fue informada de la noticia y aún más, que no les haya sido permitido hacerle el funeral respectivo, sino que hubiera sido casi que obligada a cremar el cuerpo en México y regresar al país sólo con las cenizas de su hija.

Para esta madre, hay una mafia en México que desaparece a los jóvenes, recordando el caso de la modelo caleña Stephanie Magón, quien fue encontrada muerta en la calle tras supuestamente haberse lanzado desnuda desde la terraza de un edificio, en un barrio de clase media de la capital mexicana. (Lea: Autoridades mexicanas cambian de versión sobre muerte de modelo caleña)

En este caso hubo controversia por el cambio de versión de las autoridades mexicanas sobre la muerte de la joven. Primero el Tribunal Superior de Justicia de ese país aseguró que Stephanie había sido golpeada y luego lanzada desde el cuarto piso, después fue la Procuraduría mexicana la que salió a desmentir al alto tribunal y señaló que la necropsia demostró que los golpes y la fractura en la mandíbula se debían a la caída.

Esto generó críticas de varios sectores. El colectivo de mujeres migrantes colombianas en México ‘Me Muevo por Colombia’ publicó una carta dirigida al jefe del gobierno de la capital mexicana, Miguel Ángel Mancera, así como a otras autoridades de la Ciudad de México y de la embajada de Colombia. En la misiva, manifiestan su total repudio e indignación frente a los actos de violencia y feminicidios que se han venido ejecutando en la Ciudad de México en los últimos años.

Entre tanto, la madre de Sara lucha porque se descubra la verdad y dice que quizás su hija le dejó el legado de ayudar en la búsqueda de jóvenes desaparecidas en ese país o quienes se encuentran en la cárcel sin justa causa.

Siguen siendo confusas las causas de la muerte de la joven colombiana Sara Ramírez Bonilla, quien fue encontrada muerta en el césped del hotel Villas del Palmar en Cancún tras supuestamente haber caído del sexto piso en estado de embriaguez, según lo informado por las autoridades mexicanas.

María Claudia Bonilla, madre de la joven, de 22 años de edad, concedió una entrevista a Noticias RCN en la que aseguró que en el caso de su hija se han presentado innumerables irregularidades como que únicamente pudiera sacar del país el cuerpo de su hija cremado, o que se haya dado un dictamen de la muerte sin ni siquiera hacerle una autopsia al cuerpo. (Lea: Confusas versiones en caso de colombiana muerta en hotel de Cancún)

“Dicen que Sara murió de una fractura craneoencefálica, pero cómo hicieron pasara saberlo si hay parámetros internacionales para hacer autopsias, y nada de eso sucedió”, cuestiona María Claudia.

De hecho va aún más allá y afirma que su hija no se suicidó como lo asegura la Fiscalía de México. “A ella la mataron, ¿cómo? eso está por averiguarse porque todo lo tienen muy organizado. A mí me hicieron firmar una serie de papeles para encubrirse entre ellos y no sé qué complicidad haya entre el hotel, la morgue y la Policía”.

Sobre las versiones encontradas entre las autoridades y el novio de su hija, quien estaba con ella de vacaciones en Cancún, se mostró extrañada porque según el relato de la pareja de su hija, él subió a la habitación a bañarse y ella prefirió quedarse en el lobby fumándose un cigarrillo. Al no encontrarla, empezó a buscarla por todo el hotel y pasó varias veces por el lugar donde fue encontrado el cuerpo.

“El cuerpo fue puesto en ese sitio”, asegura y además confirma la versión que se había conocido hace unas semanas frente a que el novio habría tenido que pagar 5.000 dólares a los oficiales para que le permitieran salir de México.

“Cuando el novio sale, lo meten en un cuarto y de ahí lo tienen todo el día y le piden 5 mil dólares para llevarlo al aeropuerto y no incriminarlo en el asesinato de mi hija”, indicó.

María Claudia lamenta cómo fue informada de la noticia y aún más, que no les haya sido permitido hacerle el funeral respectivo, sino que hubiera sido casi que obligada a cremar el cuerpo en México y regresar al país sólo con las cenizas de su hija.

Para esta madre, hay una mafia en México que desaparece a los jóvenes, recordando el caso de la modelo caleña Stephanie Magón, quien fue encontrada muerta en la calle tras supuestamente haberse lanzado desnuda desde la terraza de un edificio, en un barrio de clase media de la capital mexicana. (Lea: Autoridades mexicanas cambian de versión sobre muerte de modelo caleña)

En este caso hubo controversia por el cambio de versión de las autoridades mexicanas sobre la muerte de la joven. Primero el Tribunal Superior de Justicia de ese país aseguró que Stephanie había sido golpeada y luego lanzada desde el cuarto piso, después fue la Procuraduría mexicana la que salió a desmentir al alto tribunal y señaló que la necropsia demostró que los golpes y la fractura en la mandíbula se debían a la caída.

Esto generó críticas de varios sectores. El colectivo de mujeres migrantes colombianas en México ‘Me Muevo por Colombia’ publicó una carta dirigida al jefe del gobierno de la capital mexicana, Miguel Ángel Mancera, así como a otras autoridades de la Ciudad de México y de la embajada de Colombia. En la misiva, manifiestan su total repudio e indignación frente a los actos de violencia y feminicidios que se han venido ejecutando en la Ciudad de México en los últimos años.

Entre tanto, la madre de Sara lucha porque se descubra la verdad y dice que quizás su hija le dejó el legado de ayudar en la búsqueda de jóvenes desaparecidas en ese país o quienes se encuentran en la cárcel sin justa causa.