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Según Carlos Cuenca Chaux, nuevo presidente de la Cámara de Representantes, tuvieron que pasar 39 años, después de Hernando Turbay (Caquetá), para que alguien de la Amazonía colombiana llegara a esa posición que hoy ocupa. “¡La gente buena de provincia está presente!”, dijo este parlamentario de la Guainía al comenzar su discurso de posesión.
Sin dejar sus raíces, Cuenca Chaux, quien es oriundo de Huila, pero que emigró desde muy niño a ese departamento de la Amazonía colombiana, manifestó que su llegada a la presidencia de la corporación “es muy importante verla como la deuda histórica que se tiene con nuestra tierra y nuestra gente, se empieza a compensar en algo, falta mucho para lograr el desarrollo tan anhelado de la Amazorinoquía”, dijo, como promesa de trabajo en esta legislatura.
Reconoció su nombramiento, también, como un impulsor a que jóvenes de la región se enganchen con el ejercicio político, viendo en él un ejemplo de que es posible trabajar por la región desde el Congreso.
Como acto protocolario, agradeció a todas las bancadas, sin dejar a ningún fuerza política de un lado, y a sus jefes naturales por depositar en él un voto de confianza para presidir la Cámara de Representantes, especialmente a su colectividad, Cambio Radical.
“A mis compañeros de Cambio Radical y a nuestro jefe natural, el doctor Germán Vargas Lleras, a quien respeto y admiro, les reitero una vez más toda mi gratitud y todo mi compromiso para seguir haciendo de este partido la fuerza política influyente que hará de Colombia una nueva historia”, dijo.
Siguiendo con sus promesas, el presidente de la Cámara le aseguró al Gobierno: “No seremos un obstáculo”. Eso sí, reiteró su independencia, sacando de tajo toda especulación que apuntaba a que Cambio Radical se declararía partido de gobierno. También aseguró que el debate de control político estaría siempre presente, como estrategia de retroalimentación entre Legislativo y Ejecutivo.
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“Estaremos prestos para estudiar todas las iniciativas y reformas que sean necesarias para sacar el país adelante: reforma a la salud, fortalecimiento al medio ambiente y protección animal, reforma agraria, reforma a la administración de justicia, la ley de cielos abiertos, la creación del Ministerio de la Familia y la iniciativa de la cadena perpetua para quienes violan y asesinan a nuestras niñas y niños. Todo esto requiere de respuestas contundentes por parte de nosotros”, aseguró Cuenca Chaux.
Igualmente, destacó los proyectos anticorrupción como una de las principales tareas de la corporación. “Lideraremos las reformas requeridas para alejar del manejo de lo público prácticas perversas, ilegales o antiéticas, incluso aquellas que se han vuelto cotidianas”, postuló.
Otro tema que dejó sobre la mesa fue el del apoyo a los deportistas colombianos. “Así como hemos apoyado y celebrado la creación del Ministerio del Deporte, también debemos estudiar la propuesta de medidas que otorguen garantías a nuestros deportistas, tanto en su plena actividad, como en su retiro”, resaltó.
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Por último, a su mesa directiva, conformada por Óscar Villamizar, del Centro Democrático, y María José Pizarro, de los Decentes, les manifestó que durante su presidencia prevalecerá el respeto a la diversidad, la equidad entre mayorías y minorías. “Tienen en mí a un hombre democráta que busca consensos, cuenten con esa garantía siempre”, prometió.
Por último, declaró su presidencia como una de puertas abiertas que trabajará “hacia la mejora del Estado social y democrático de derecho (...) nos corresponde afrontar la realidad, que nos exige legislar para la libertad, la igualdad, la fraternidad y la paz”, dejando su ferviente postura propaz.