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A raíz de la columna de Daniel Coronell titulada ‘Petroleaks’ y publicada el pasado domingo 21 de abril —en la que el periodista revive un cable de 2008 de Wikileaks en el que Gustavo Petro, en ese momento, hace alusión a una posible relación de dos excongresistas del Polo con las Farc—, los nombrados en dicho artículo salieron este lunes a los medios de comunicación a dar su parte sobre lo que expone el documento.
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En específico, el cable de Wikileaks evidencia en el punto seis de la comunicación que Petro, entonces militante del Polo Democrático, le dice a la Embajada de Estados Unidos que “no descarta la posibilidad de que algunos miembros del Polo Democrático mantengan vínculos inapropiados con las Farc”, refiriéndose a los excongresistas Wilson Borja y Gloria Inés Ramírez, también miembros del Polo.
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“Si los dos estuvieran implicados en relaciones activas con las Farc, dijo Petro, eso dividiría al Polo” es la última frase del cable, según se lee en el artículo de Coronell. Y, más adelante en el mismo, se nombra a la también excongresista Piedad Córdoba, solo una vez y sin hacer mayor énfasis en su actuar político.
Ante esa información, Wilson Borja manifestó su inconformidad con las menciones que Petro hizo en 2008 a la embajada americana, entre otras cosas porque tanto él como Ramírez (que no se ha pronunciado al respecto) fueron investigados y absueltos de cargos que los relacionaran con la extinta guerrilla.
“Gustavo comete un gran error: quedar bien con Estados Unidos mientras deja en duda nuestra honestidad. Deja en duda nuestra posición frente a la guerra. Esas cosas Gustavo las acostumbra; todo aquello que le pueda significar una ventaja a su posición e interés político. Y la embarró por no conectar la lengua con el cerebro, porque además éramos compañeros de Congreso, de oficina, de comisión y amigos de familia”, dijo el exrepresentante a la Cámara en una entrevista con Blu Radio.
Además, Borja reiteró que, para él, el problema no radica en que en algún momento haya sido investigado por Farcpolítica, sino la forma de actuar de Petro en torno a esos señalamientos. “El problema no es la investigación montada contra nosotros por Álvaro Uribe Vélez. El problema es que se preguntaron en un momento determinado por esa investigación y en vez de reconocer la lealtad de nosotros como sus compañeros, y de quien soy yo y mi posición política [Petro] no lo hizo. Sino que aprovechó el momento”.
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¿Por qué? Según Borja, tendría que ver con el deseo en ese entonces del hoy senador por la Colombia Humana para ser visto con buenos ojos por un país como Estados Unidos, cercano y cooperador de Colombia.
“Gustavo Petro, por tratar de ser presidente, maneja una relación con Estados Unidos para que sea visto como un demócrata. Independientemente de que quede como sapo o desleal, Gustavo utiliza esa forma de ver la política bajo esos criterios. Es un animal político. No va a quedar bien conmigo hasta que salga a decir qué fue lo que hizo”, expresó.
Por su lado, en entrevista con la FM, Piedad Córdoba hizo un recuento de su trabajo en favor de la paz mientras estuvo activa en la política, con el fin de dejar en claro que ella no hizo parte ni tuvo acercamiento con las Farc, pese a que en el documento de Wikileak no haya sido señalada por Petro de tal cosa.
“Es muy infortunado porque yo tuve la oportunidad de ser compañera tanto de Gloria como de Wilson, siempre trabajando en el tema de la paz igual que yo. Jamás pertenecí ni he pertenecido a las Farc y las mismas Farc lo pueden corroborar. Siempre estuve en el Partido Liberal. Lo único que hice fue una labor humanitaria, que tiene que ver con las liberaciones de muchas personas que estaban en manos de las Farc y que constituía un primer paso a una salida negociada del conflicto”, manifestó.
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De igual, forma, se refirió al hecho de que esta información que data de 2008 sea expuesta nuevamente, y de la comunicación entre Petro y la embajada americana. “Yo no sé qué se busca con ello. Yo estoy muy marginada absolutamente de todo. No pertenezco a la tal Colombia Humana, no he votado por Petro. En su momento supe que era una persona muy perspicaz. Me parece supremamente desagradable que uno tenga que darle cuentas a un gobierno extranjero. Conozco a Gloria Ramírez y a Borja y la única razón que les asistía era lograr la paz en Colombia”.