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En los últimos días, la Cancillería ha estado en la mira por distintas razones. Tan solo este miércoles se conoció el pronunciamiento ante la ONU de la canciller Claudia Blum en la que responsabilizó al Partido Comunes por las disidencias de las Farc. Las críticas llegaron por montones y hasta pidieron su renuncia. Por otro lado, en la misma jornada de las desafortunadas declaraciones, en el Congreso se llamó la atención sobre la forma como el gobierno de Iván Duque está llevando a cabo el servicio diplomático.
El representante Mauricio Toro y otros miembros de la Alianza Verde cuestionaron que el primer mandatario está rompiendo su promesa de campaña de darle un nuevo enfoque a la designación de embajadores, cónsules y otros miembros de las representaciones diplomáticas de Colombia en el mundo. A través de un debate de control político, calificaron la estrategia diplomática de esta administración como igual a las anteriores: usar embajadas y cargos diplomáticos “para pagar favores políticos, para dar cargos privilegiados a sus amigos y los familiares de estos”.
Toro cuestionó que el presidente haya dicho en campaña y durante sus primeros meses de mandato que iba a confeccionar un cuerpo diplomático con al menos 50% de sus funcionarios provenientes de la carrera diplomática, cuando, según las pesquisas del representante, esto no ha sido así. Según Toro, solo el 17,5% de los nombramientos hechos por el presidente Iván Duque son de carrera Diplomática.
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El representante llevó al Congreso una investigación periodística del portal Vorágine en el que se da cuenta que el primer mandatario ha hecho 257 nombramientos diplomáticos desde el comienzo de su mandato hasta este febrero. Sin embargo, solo 45 son provenientes de la carrera diplomática. De esos, tan solo ocho son embajadores y el resto ocupan los escalafones más bajo del régimen de la Cancillería en el exterior.
Durante el debate de control político, también se señaló que el Ejecutivo habría aprovechado la figura de la provisionalidad para que al cuerpo diplomático lleguen personas ajenas a la carrera. Según el decreto 274 del 2000, se debe nombrar en provisionalidad a una persona que no haga parte de la carrera diplomática pero que deba asumir un cargo diplomático o consular. Bajo esta figura, el gobierno habría nombrado a 134 personas que no hacen parte oficial del servicio diplomático.
“52,1% de los nombramientos han sido totalmente discrecionales de Iván Duque, y sin demostrada experiencia diplomática”, expresó el representante Toro, que diseccionó esta cifra para dar cuenta de la cantidad de nombramientos a discrecionalidad y sin hacer parte de la carrera diplomática: 48 embajadores, 12 ministros plenipotenciarios, 11 ministros consejeros, 15 consejeros de relaciones exteriores, 36 primeros secretarios, 2 segundos secretarios y 10 terceros secretarios.
Según reveló Toro, solo el 23,7% de los embajadores son de carrera diplomática y son varias las otras categorías que no alcanzan ni el 30% (primeros secretarios, consejeros de relaciones exteriores, ministros consejeros y terceros secretarios). Solo los segundos secretarios (67%), ministros plenipotenciarios (52%) y cónsules (58%) tendrían una mayoría compuesta por diplomáticos de carrera, de acuerdo con los datos que expuso el congresista de la Alianza Verde.
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Mauricio Toro también denunció que la Cancillería no respondió al requerimiento de en cuáles países están los diplomáticos de carrera. Sin embargo, denuncias que recibió el representante apuntan a que los funcionarios de carrera serían asignados a las misiones exteriores de poca relevancia y las que se les asigna menos presupuestos. Esta denuncia fue acompañada de un llamado de atención debido a que en la última década solo han ascendido 13,2% de funcionarios de carrera a ser embajadores y 18,2% a ser plenipotenciarios.
Además de dar estos datos, el representante cuestionó algunos de los nombramientos hechos durante el gobierno de Iván Duque. En este listado se incluye a María Ximena Durán Sanín, hija de Noemí Sanín; Ubeimar Delgado, exgobernador del Valle del Cauca que apoyó a Duque en campaña; César Tulio Delgado, hermano del mencionado anteriormente y quien recibió el nombramiento luego de que el primero no cumpliera con los requisitos de idiomas; y Antonio José Ardila, hijo del empresario Carlos Ardila Lule.