El proyecto de Aguas de Bogotá para seguir viviendo

Juan Manuel García es director de Aguas de Bogotá desde septiembre de 2016. / Cortesía

En febrero, con la entrada en operación del nuevo esquema de aseo, la empresa Aguas de Bogotá, que se encargaba de la recolección de basuras en el 50 % de la ciudad, se quedó por fuera de ese mercado. La situación obligó a despedir a la mayoría de sus 3.700 empleados, lo que derivó una serie de protestas, que fueron la antesala de la crisis de las basuras que se presentó este año. Para muchos, el futuro de la empresa era su liquidación.

Sin embargo, con una planta de personal reducida, continuó al frente de labores menores, como la administración de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) Salitre, el mantenimiento de parques y humedales, y la administración de un acueducto a las a fueras de Bogotá.

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Ahora, de acuerdo con su gerente, Juan Manuel García, el plan es seguir con estas labores, tanto en la capital como en otros municipios. En sus planes más próximos, la idea es ampliar su nómina para incursionar en la administración de acueductos y el aprovechamiento de residuos.

¿Cuál es la situación de la empresa?

Es una sociedad anónima y empresa de servicios públicos independiente. Financieramente está sana y operativamente es productiva, por lo que tenemos muchas ganas y proyectos para seguir adelante. Ahora hay 650 empleados y aspiramos terminar el año con 900, ya que necesitamos mucha mano de obra para llevar a cabo proyectos como el mantenimiento de los canales y cuerpos de aguas de Bogotá y todo el proceso de aprovechamiento de residuos.

¿Estos proyectos son a largo plazo?

Todo lo seguimos haciendo y esperamos incrementar actividades. Además, somos los prestadores de servicio del acueducto en Arboretto. Compramos el agua en bloque al acueducto de Bogotá y le hacemos toda la administración allá.

¿Qué tanto dependen del Acueducto de Bogotá?

No dependemos de ellos. Tiene la mayor parte de las acciones, sin embargo, somos empresas independientes, con objetos diferentes, pero ambos podemos prestar servicios y operación de acueductos.

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Entonces ¿buscan a futuro administrar otros acueductos?

Ofrecemos el servicio, porque tenemos la preparación, la experiencia, el conocimiento y lo podemos hacer. En Colombia hay un gran déficit de operación de acueductos y nosotros tenemos el apoyo de empresas como Caudales de Colombia, que opera en Mosquera con resultados muy positivos.

¿Qué trabajo están haciendo con los humedales?

Con el Acueducto estamos interviniendo la franja acuática, mientras que la Secretaría de Ambiente trabaja en la franja terrestre. Tenemos metas muy ambiciosas, dado que hay más disposición de invertir en estos proyectos. Además intervenimos los parques de montaña y estamos empezando a tocar puertas en municipios y otros departamentos para hacer esta tarea.

¿Ya tienen acuerdos con municipios?

Estamos presentando nuestro portafolio. Hemos tenido muy buenas retroalimentaciones y creo que después de ley de garantías surgirán nuevos proyectos. Además, nos podemos presentar a licitaciones, como cualquier compañía, y tenemos muy buenos elementos que nos hacen creer que vamos a ganar muchas de ellas.

¿Cuál es su situación financiera?

A marzo estamos dando utilidades, igual que las dimos el año pasado, que fueron de $17.000 millones. Somos operativamente viables, no tenemos ninguna amenaza de causal de disolución, se ha recuperado el patrimonio y lo que tenemos son cosas por venir.

¿Qué pasó con el contrato de recolección de residuos que firmaron con 10 localidades?

En noviembre del año pasado firmamos con esas localidades contratos para embellecer y recuperar algunos puntos críticos. El programa ha sido bastante exitoso, porque la comunidad lo ha recibido con orgullo. Hubo una confusión sobre si esto era la recolección de residuos mixtos en Bogotá o no, pero la Uaesp ya se hizo cargo y contrató con los operadores que administran las Áreas de Servicio Exclusivo esa recolección.

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En el Concejo se denunció que los extrabajadores de Aguas de Bogotá, que deben ser reintegrados, se encuentran en una bodega sin hacer nada ¿Qué es lo que ocurre con ellos?

Hemos recibido 257 tutelas, de las cuales, en 57 casos se ha ordenado el reintegro. Los hemos recibido, pero como no teníamos las vacantes, entonces adecuamos un lugar con iluminación, servicios sanitarios, asientos, televisión y mesas donde los recibimos. Lo que procede es determinar la pérdida de capacidad laboral, ya que en la mayoría de casos el reintegro es por temas de salud. Cumplimos con el reintegro, el pago de su seguridad social y demás obligaciones. La próxima semana, 40 personas serán reubicadas, mientras que con el resto esperamos tener las evaluaciones que nos permitan conocer qué labores pueden realizar o dónde los podamos ubicar. La finalidad es darles un oficio.

¿Está contemplado que Aguas de Bogotá vuelva a presentar el servicio de aseo?

Creería que la empresa tiene todos los elementos y argumentos, y esperamos en un futuro haber recuperado todos sus indicadores financieros, en los que se siga manteniendo la salud financiera, para convertirla en un vehículo mucho más útil.

¿En qué otros campos quieren incursionar?

Hemos venido capitalizando mucho los aprendizajes. En aprovechamiento de residuos tenemos gran conocimiento, desde la separación en la fuente hasta su misma recolección, agrupamiento y disposición final para la producción de energías limpias. Es por eso que estamos armando propuestas sobre este tema para ofrecer a distintos municipios.

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