“CREAR, emprendimiento inspirado en la herencia de artesano de mi padre, damos vida a las hormas en madera empleada por los ancestros zapateros en accesorios para interiores o exteriores”, cuenta Ángela María Caicedo, una emprendedora que estuvo presente en el Go Fest, la feria de emprendimiento organizada por la Cámara de Comercio de Bogotá. ¿Cuál es su historia? Aquí nos la cuenta, en 23 preguntas para emprendedores y sus emprendimientos.
De derecha a izquierda Jairo Arturo Lombana, Alfonso Caicedo & Angela María Caicedo.
1. ¿Cuántos años tengo? ¿Qué estudié?
Somos dos socios en el emprendimiento: 48 y 42 años, Jairo es técnico hidráulico y yo, ingeniera civil.
2. ¿Cuál fue mi idea y cuándo nació? ¿Qué fue lo que creé?
La idea surgió como herencia del oficio de mi padre, quién es artesano de antaño. Una de sus herramientas para la elaboración de zapatos son las hormas y, es por ello que para ejercer su oficio empleó innumerables modelos de hormas en madera importadas desde Italia hacia los años cuarenta. Dichas hormas ocupan mucho espacio en su taller, por lo que sugerimos debían ser desechadas y en ese momento mi padre indicó su historia, valor y agradecimiento con ellas, por lo que surgió nuestra idea de poder darles un uso recobrando la importancia en la industria del calzado y especialmente en la microempresa de mi padre quién se niega a revolucionar su empresa hacia la industrialización descartando el uso de materiales diferentes al cuero o producción en masa.
3. ¿Cómo logré hacerla realidad y llevarla a los hechos?
En una visita al taller de mi padre tomamos unos cuantos pares de hormas y las llevamos a casa donde a partir del trabajo a mano dimos rienda suelta a nuestra imaginación creando innovadores accesorios de espacios. Nuestros productos fueron socializados en nuestra familia y círculo de amigos y recibidos con extraordinaria sorpresa y quizá, la mayor sorpresa que nos dio el panorama de cuán importante es este emprendimiento es el inspirador de la idea, mi padre Alfonso Caicedo.
Un día del mes de junio en torno a la pasión de la final de la Champions, lo invitamos a casa a disfrutar del fútbol acompañado de una buena una cazuela de frijoles (su plato favorito) y con la sorpresa de que yo, su hija, había recibido mi título de Magister con un especial reconocimiento lo cual fue para él grato y sin duda lo alegró bastante. Sin embargo, esta felicidad no fue nada comparada al mostrarle lo que estábamos creando a partir de sus hormas de madera trabajadas desde el inicio del año, su expresión fue de gozo, felicidad y con sus carcajadas estrepitosas entendí que ese si era su mejor regalo.
El estar presentes en la feria Go Fest 2022 fue una grata casualidad y se dió a través de una llamada a un primo y su esposa quienes tienen un emprendimiento, Paloma Shirts. Nos dijeron ¿tienen productos para montar un stand? Nos miramos con mi esposo y dijimos sí, y llegamos a un ‘stand’ de un emprendedor que no asistió a la feria y nos brindó la oportunidad de darnos a conocer.
Si está buscando más historias de emprendimientos, sus creadores y creadoras están aquí, en Emprendimiento y liderazgo de El Espectador.
4. ¿De dónde saqué la plata para ponerla a andar y cómo la pagué?
La inversión más importante son las hormas del taller de mi padre. Los materiales y otros costos han sido del capital inicial de mi esposo y mío.
5. ¿Qué estoy logrando con mi emprendimiento? ¿Qué estoy cambiando con mi idea?
Con nuestro emprendimiento estamos logrando dar un uso a las hormas evitando su disposición final y reconociendo su importancia en el oficio de la zapatería. Otra línea de negocio es la restauración de artículos que van a llevarse a botadero brindando otra oportunidad para su uso, conllevando con esto a aliviar un poco nuestra huella de carbono.
6. ¿Soy feliz?
Sí, somos inmensamente felices con nuestro emprendimiento, al crear encontramos paz y tranquilidad y plasmamos las ideas que como equipo nos hacen diferentes. Este es el espacio donde podemos hacer lo que nos gusta sin las limitaciones de nuestras ocupaciones profesionales.
7. ¿Vendería mi emprendimiento, mi empresa?
No, no lo venderíamos, tenemos muchos sueños por cumplir con CREAR
8. ¿Qué tan duro fue para mí emprender?
Emprender es difícil, recientemente habíamos dado fin a una empresa de ingeniería en la que habíamos invertido mucho tiempo y que finalmente debimos vender por diferentes circunstancias. Dimos vida a CREAR a partir de una iniciativa ya contada y aquí vamos, la lucha que se pierde es la que se abandona, esperamos llegar con nuestra inspiración a muchos lugares enalteciendo la actividad de mi padre.
9. ¿Cumplí mi sueño? ¿Qué me hace falta?
El sueño está en siembra, esperamos cosechar con las metas que hemos fijado, queremos exportar y llevar este sueño alrededor del mundo.
10. ¿Y ahora qué? ¿Qué sigue?
Ahora seguimos creciendo y creando para llevar nuestro producto a todos los lugares de Colombia y luego, ya veremos, Italia estaría bien para iniciar.
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11. ¿Mi emprendimiento es escalable?
Cada diseño es único, exclusivo.
12. Para crecer, ¿recibiría inversión de un desconocido? ¿Le cedería parte de mi empresa?
No, por ahora no estamos interesados en recibir inversión o en ceder acciones a un tercero.
13. ¿Qué no volvería a hacer?
Querer entrar a un mercado tradicional donde los productos son tasados por costo y no por un valor.
14. ¿Quién me inspiró? ¿A quién me gustaría seguir?
Tenemos grandes inspiradores, en mi caso mi madre, una mujer valiente y libre a quien le debo todo y, bueno, mi padre.
En el caso de Jairo, quien me causó un sentimiento que puede llamarse inspiración, fue la expresión de don Alfonso cuando se habló de botar esas hormas. Él habla de las hormas con amor, un sentimiento que solo él sabe lo que valen. La vida, obra e historias que hay en todas y cada una de ellas.
Ahora una vez “recreadas” o dándoles un nuevo uso, la recompensa es ver su expresión de felicidad de tantos sentimientos encontrados. Eso hace que se haga con pasión y con muuuucho gusto.
Nos gustaría seguir más que a una persona, deseamos transportar nuestros clientes y seguidores a algunas décadas atrás, llevar a esos abuelos a los años de juventud y reconocer en ellos a través de una expresión en su rostro que hemos hecho algo bien y los llevamos a ese tiempo que por alguna razón los marcó para siempre.
15. ¿Fracasé en algún momento? ¿Pensé en tirar la toalla?
Muchas veces, cada día se fracasa de algún modo. El secreto está en insistir, persistir y nunca desistir.
16. ¿Hago parte de algún tipo de comunidad que me ayuda en este camino de emprender?
Estamos apoyándonos en la Cámara de Comercio de Bogotá, apenas haciendo los primeros pinitos con ellos.
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17. ¿Lo que estoy haciendo trasciende? ¿Podrá impactar a nuevas generaciones?
Sin duda, una misión de vida debe ser cómo impacto menos en el medio ambiente, cómo aminorar la huella de carbono en este paso por el mundo y CREAR invita a optimizar el uso de lo que algunos consideran que no sirve.
18. ¿Cómo me veo en 10 años y cómo veo a futuro mi emprendimiento, mi empresa?
Queremos estar en 10 años creando y creciendo, que no estemos apagados. Queremos avanzar con las formas de marketing y no perder nuestra esencia.
19. ¿Qué papel han jugado mi familia y mis amigos?
Ha sido un papel sin duda importante, ellos han visto siempre más allá y sus palabras, expresiones y comentarios nos han ayudado a seguir.
20. Yo lo logré. ¿Ayudaría a otros emprendedores a que lo logren?
Aún estamos en siembra, no hemos llegado a donde queremos estar y ayudaremos a quién quiere crecer.
21. ¿Qué papel jugó mi equipo? ¿Quién es?
El equipo del emprendimiento está formado por mi esposo y yo. Jairo hace los sueños realidad, yo imagino y él materializa. Somos un gran equipo, hemos superado adversidades que nos han fortalecido en varios aspectos ¡Somos un equipazo!
22. ¿Cuál es mi sello personal? ¿Qué me diferencia del resto?
Nuestro sello personal es que somos inspiradores, ayudamos al medio ambiente con nuestras creaciones y damos una oportunidad a los objetos que van a desaparecer en disposición final. Enaltecemos esta gran labor artesanal de la zapatería, de donde aún hay mucha historia por contar.
23. ¿Qué he aprendido de todo esto?
Aprendimos que se vale soñar.
Si conoce historias de emprendedores y sus emprendimientos, escríbanos al correo de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) o al de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com). 👨🏻💻 🤓📚