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En su más reciente rueda de prensa, el martes 26 de agosto, la Federación Nacional de Cafeteros (Fedecafé) tuvo en conversación a su gerente general, Germán Bahamón, con la directora de la Organización Internacional del Café (OIC), Vanusia Nogueira. Durante el evento dieron a conocer que tuvieron un encuentro con la ministra de agricultura, Martha Carvajalino, para conversar sobre los retos y los compromisos que se deben asumir para beneficiar al sector caficultor.
Este sector ha crecido con fuerza en los últimos años y se ha posicionado con solidez en el mercado. Sin embargo, según Bahamón, el Ministerio de Agricultura ha puesto especial atención en reducir los daños ambientales asociados a la producción de café.
“(La ministra) siempre estuvo muy pendiente de cómo podemos buscar mayor competitividad y además cómo hacer una caficultura que sea amigable con el medio ambiente, que tenga la posibilidad de identificación de otras líneas de cultivo en la misma área”, explicó el gerente general de Fedecafé.
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Además, respecto a las iniciativas para impulsar la prosperidad económica en los territorios más golpeados por el conflicto armado, se lograron algunos acuerdos. “Algo bien importante en que quedamos con la ministra es el desarrollo de una marca de cafés para estas zonas de conflicto en Colombia”, aseguró Bahamón.
El gerente aseguró que buscan apoyar iniciativas como la de “Café por la paz” que surge de productores que migraron de cultivos ilícitos “en zonas como el viñedo de Micay y del Catatumbo” para dedicarse a la siembra de café.
Cabe recordar que esta iniciativa involucra alianzas entre el sector privado, entidades como la Misión de la ONU y Fedecafé, con el fin de construir una estrategia nacional que sirva de puente para la paz, la reincorporación de excombatientes y el apoyo a víctimas en territorios fuertemente afectados por la violencia. Esto se hace a través de la exportación de café producido por firmantes de paz y pequeñas comunidades caficultoras del territorio colombiano.
El gerente general de Fedecafé aseguró que estas iniciativas van a “tener un acompañamiento especial de la Federación en términos de su comercialización para que tengan un mejor valor”.
Aun así, en regiones como Caldas, la dependencia de las exportaciones hacia Estados Unidos es preocupante: el 60,4 % de las exportaciones no mineras del departamento se dirigen a ese país, lo que deja a Caldas expuesto a los vaivenes del precio internacional del café y a la volatilidad del dólar.
¿Cómo está el panorama general del café?
A nivel regional, el impacto económico del café es notorio. En Caldas, las exportaciones relacionadas con el sector crecieron 47,3 % en el primer semestre del año. Lo que quiere decir, que pasó de vender US$469,9 millones en bienes no mineros (2024) a US$692,4 millones en 2025, según cifras del DANE y del Ministerio de Comercio. Además, a su vez se avanza en infraestructura con la licitación para construir una terminal aérea en el Eje Cafetero.
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“Si bien es cierto que el sector agropecuario es el que ha venido siendo el motor, dentro del mismo el café ha sido particularmente el impulsor del crecimiento según registra el DANE. Para darle cifras, al último mes, en los últimos 12 meses, tenemos 14,6 millones de sacos. Es la mejor producción desde 1992. Eso en términos de valor de cosecha, se traduce a $21,9 billones que han irrigado en los últimos 12 meses los 23 departamentos y los 611 municipios”, explicó Bahamón.
Además, el gerente explicó que se han producido US$5400 millones en la exportación de café de los últimos 12 meses.
¿Qué viene?
En medio de la situación arancelaria que ha perjudicado a varios países, Colombia parece tener una ligera ventaja. Según la Cámara Colombo Americana (Amcham), el arancel general del 10 % que tiene Colombia se ha convertido en el nuevo 0 %, pues hay muchos otros países que tienen aranceles mucho más altos, cómo es el caso de Brasil y de Vietnam, dos países fuertes en producción de café.
Aun así, Nogueira hizo un llamado a la calma, pues la situación sigue siendo incierta: “Me parece que aún es muy temprano para que saquemos lesiones de lo que está haciendo el gobierno americano. Acabamos de empezar a tener los aranceles hace 2 semanas. Entonces, creo que tenemos que tener un poco de calma y de paciencia para mirar cuál va a ser efectivamente el riesgo de todo esto”.
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Por otro lado, con respecto a la producción de café para Colombia en el siguiente semestre, Fedecafé proyecta una disminución del 11,25 % con una cosecha estimada de 7,1 millones de sacos. Esto se debe a que después de producciones muy abundantes las plantas de café se resienten y suelen dar una cosecha moderada que además estará acompañada de irregularidades climáticas que también pueden afectar la producción, según lo explicado por el gerente general.
Por último, dentro de las proyecciones que se tienen, la directora de la OIC, Vanusia Nogueira afirmó que habrá una demanda global que podría alcanzar los 200 millones de sacos de café en 2030 e hizo un llamado a la diversificación y a la competitividad para que el sector para que la oferta logre suplir la demanda de los consumidores.
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