Carlos Mattos firmó indemnización de USD$1 millón a rama judicial por caso Hyundai

Esta es una de las fotos que se conocen de Carlos Mattos, luego de tres años de hacerle el quite a la justicia. / Policía

El empresario Carlos Mattos dio el primer paso para pagar los daños que ocasionó con su repartija de sobornos a funcionarios judiciales en el llamado caso Hyundai. En una indemnización sin precedentes en un caso de corrupción judicial, el empresario, que está a la espera de su condena tras negociar con la Fiscalía, ya formalizó lo que había dicho previamente en audiencias: firmó un contrato de transacción en el que se comprometió a consignarle, en total, $1 millón de dólares a la Judicatura.

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El contrato lo firmó Carlos Mattos, desde la cárcel de Cómbita (Boyacá) y de su puño y letra, con la Dirección Ejecutiva de la Rama Judicial. En el documento, que será determinante para ponerle punto final a uno de los mayores escándalos de corrupción que el país haya visto en los años recientes, se lee: “mediante el presente contrato las partes convienen terminar extrajudicialmente cualquier controversia judicial que pudiere surgir de estos hechos y precaver cualquier litigio”.

Luego de negar su responsabilidad en el caso Hyundai por años, el empresario Mattos llegó extraditado a Colombia a finales de 2021 y comenzó a negociar con la Fiscalía. Mattos está en juicio en dos procesos distintos por haber entregado sobornos a funcionarios judiciales para torcer procesos que había instaurado él contra la casa matriz en Corea de la automotriz Hyundai, pues esta compañía le había quitado la representación en Colombia.

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En la negociación que hizo con la Fiscalía, Carlos Mattos aceptaría pagar $500.00 dólares por cada proceso en el que estaba en juicio, reconocería su responsabilidad los delitos que le imputaron, y pediría perdón. Pero antes de que recibieran luz verde de un juez, la negociación se vio empañada. Primero, por un cambio de abogados de Mattos, luego se conocieron imágenes del empresario andando como un hombre libre por Bogotá cuando debía estar en la cárcel La Picota y, por último, un juez dijo que Mattos no había cumplido con su compromiso de reparar a la rama judicial.

Aunque el empresario no ha consignado el millón de dólares prometido, su firma en este contrato ya lo compromete legalmente. Es decir, Mattos se trata de un nuevo paso de Carlos Mattos hacia ponerle punto final al caso Hyundai. El siguiente paso lo tendrá que dar el 21 de abril, cuando está citado su defensa le insistirá a la justicia que avale el preacuerdo al que llegó por haberle entregado millones en efectivo a la jueza Ligia del Carmen Hernández, quien estaba por decidir uno de los expedientes contra Hyundai.

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Desde funcionarios de juzgados hasta una jueza, todos los implicados en el caso, uno a uno, fueron aceptando cargos. Sin embargo, mientras el escándalo se desarrollaba en Colombia, Mattos estaba en España, país del que también es ciudadano. Tras dos pedidos de extradición que llegaron hasta la Audiencia Nacional, máxima autoridad judicial del reino ibérico, Mattos finalmente fue enviado a Bogotá en noviembre de 2021 y permanece recluido desde entonces.

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