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Guillermo Grosso Sandoval, supuestamente, le propuso a un conocido crear y poner en funcionamiento una Institución Prestadora de Salud (IPS) en 2016. Según la Fiscalía, le habría entregado a su amigo dos contratos por un total de $52.600 millones, con el propósito atender 70.000 pacientes en las localidades de Engativá y Suba, en Bogotá. Este se contempla como el tercer expediente en contra de uno de los hombres más mencionados en la crisis del sector salud que ahora será llevado a juicio por el delito de cohecho (soborno).
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Según el director especializado contra la corrupción, Eduar Alirio Calderón, las pruebas que tiene el ente acusador dan cuenta de que, por el posible negocio, Grosso Sandoval acordó recibir entre $40 y $50 millones mensuales. La investigación indicó que, durante un poco más de un año, habría recibido el total de $664 millones en efectivo, entre mayo de 2016 y junio de 2017.
Además, la Fiscalía afirma que uno de los contratos se firmó en febrero de 2016, y ascendió a $28.229 millones. El otro se cerró días después, por más de $24.400 millones de pesos. Ambos negocios tendrían un plazo de ejecución a tres años y prometían garantizar servicios de medicina general, odontología, oftalmología, laboratorio clínico, y atención a la primera infancia y a las mujeres gestantes.
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Debido a lo anterior, el expresidente de la EPS irá a juicio penal. Las pruebas indicarían que se habría aprovechado de su cargo público y su conocimiento sobre las Entidades Prestadoras de Salud (EPS) para recibir altas sumas de dinero. Por disposición de una fiscal de la Dirección Especializada contra la Corrupción a cargo del caso, la audiencia preparatoria de juicio comenzará el próximo 3 de marzo.
Sin embargo, este es apenas uno de los de hechos irregulares que habría organizado Grosso desde 2013. Este es apenas el más reciente y ya había sido dado a conocer en junio de 2022, cuando apenas se informó de su vinculación al caso de los presuntos contratos por la IPS que hizo con su amigo en 2016. En todas las investigaciones dentro de las que lo han vinculado, incluyendo las disciplinarias, el expresidente de Cafesalud EPS se ha declarado inocente.
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