Este martes se llevó a cabo la sesión número 47 del Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Aunque la mayor atención se la llevó Nicaragua por la captura de opositores de forma arbitraria, Colombia fue mencionada por la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet. Esta hizo referencia al paro nacional y a los posibles excesos que se han cometido en medio de las movilizaciones.
“Mi Oficina ha expresado su profunda preocupación por las alegaciones sobre graves violaciones de derechos humanos por parte de la Fuerza Pública del Estado”, expresó Bachelet, que señaló que, en los más de 40 días del paro, a su oficina han llegado denuncias de 56 muertes en medio de las movilizaciones, 54 de civiles y 2 de policías. Asimismo, comentó que se habrían reportado 49 casos de violencia sexual.
“Mi Oficina condena todas las formas de violencia, llama al pleno respeto por el derecho a la reunión pacífica y alienta a resolver la crisis mediante el diálogo”, continuó la expresidente chilena. Luego, anunció que también estaba documentando los abusos a los derechos humanos por actores no estatales y los daños que han dejado los bloqueos.
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A rengón seguido celebró los pronunciamientos del presidente Iván Duque de tolerancia cero a los excesos de la Fuerza Pública y pidió investigaciones independientes para clarificar lo ocurrido durante el paro. Por último, Bachelet cerró su intervención reiterando que “la implementación plena del Acuerdo de Paz, incluido el apoyo al histórico proceso de justicia transicional, sigue siendo clave como respuesta a los disturbios actuales”.
El pronunciamiento de Michelle Bachelet no gustó mucho en la delegación colombiana ante la ONU. La embajadora ante la organización plurinacional, Alicia Arango, fue bastante crítica a lo dicho por la alta comisionada y decidió pronunciarse con una rueda de prensa ajena a las sesiones del Consejo.
Arango cuestionó las cifras de muertos dadas por Bachelet y aseveró que serían mucho menores. “Se ha comprobado a la fecha que hay 24 personas que murieron por el paro, pero 19 no murieron por el paro y 11 están en investigación. Cuando la señora Bachelet dice que hay 54 muertos por el paro se equivoca y eso le hace daño al país”, expresó la exministra del Interior, que aseveró que anunciar dichas cifras sin verificación “no es justo ni para las víctimas ni para Colombia”.
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Uno de los puntos que menos gusto de lo dicho por Michelle Bachelet fue la referencia al acuerdo de paz. Aunque no se dijo que fuera causa de las protestas, la mención fue tomada de esta forma por la delegación colombiana. “Todos sabemos que las protestas no fueron por ese motivo, sino por motivos distintos a ese. Entonces ese tipo de inexactitudes lo que hace es poner en riesgo la institucionalidad y la democracia de Colombia”, expresó Arango.
La embajadora ante la ONU rechazó la posición asumida frente al acuerdo y señaló que sí se estaría cumpliendo con su implementación, aunque lanzó algunos dardos contra los miembros del Partido Comunes: “Me gustaría que se sentara a revisar cómo es que es el tema del acuerdo de paz. La implementación ha sido con la guerrillerada. Los grandes líderes de las Farc están posicionados, todos saben dónde y cómo. Estamos trabajando con aquellos que quedaron en el aire”.