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Los trastornos del sueño afectan a cerca del 40% de la población mundial, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Por esta razón, todos los 17 de marzo se conmemora el Día Mundial del Sueño, para concientizar a la población sobre la existencia de estos trastornos del sueño para prevenirlos. La fecha fue establecida por la Sociedad Mundial del Sueño (World Sleep Society) desde el 2008.
La mayoría de los adultos necesitan 7 o más horas de sueño de buena calidad en un horario similar todas las noches. Los niños tienen que dormir más que los adultos. Los adolescentes necesitan entre 8 y 10 horas cada noche, los niños en edad escolar entre 9 y 12 horas; los niños en edad preescolar necesitan entre 10 y 13 horas diarias (incluidas las siestas), y los de 1 a 3 años necesitan dormir entre 11 y 14 horas diarias. Los recién nacidos necesitan dormir entre 14 y 17 horas diarias. Y, ¿por qué se necesita dormir?
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Dormir lo suficiente puede ayudar a reducir la frecuencia de enfermedades, mantener un peso saludable, disminuir el estrés y mejorar el estado de ánimo y pensar con más claridad y desempeñarte mejor en los estudios y en el trabajo. Mientras se duerme, las funciones del cerebro y cuerpo siguen activas para mantener saludable al cuerpo. Por eso, es importante no solo dormir, sino cuándo se duerme y cómo.
El sueño es un proceso biológico. El cuerpo programa el “reloj biológico” según las horas de sol del lugar donde se vive. Esto provoca que el cuerpo quiera descansar naturalmente por la noche y estar despierto durante el día. Si se trabaja de noche y se duerme de día, es posible que resulte difícil dormir lo suficiente. Existen más de 100 trastornos diferentes de sueño, según la Organización Mundial de la Salud.
Dormir lo suficiente no se refiere solo al total de horas. También es importante que el sueño sea de buena calidad y que se haga en un horario constante y habitual para dormir. No dormir lo necesario puede ser un factor de riesgo para desarrollar enfermedades crónicas como obesidad, hipertensión, diabetes o depresión.
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Los trastornos del sueño pueden causar muchos problemas. Es normal tener dificultad para dormir de vez en cuando., pero las personas con trastornos del sueño tienen estos problemas con regularidad. Algunas señales incluyen tener tanto sueño durante el día que se te dificulta hacer las actividades de la vida diaria, como manejar un auto o concentrarte en el trabajo, roncar fuerte a menudo o sentir que te cuesta trabajo mover los brazos y las piernas al despertar. Esto solo lo puede diagnosticar un especialista.